Laicos Misioneros Combonianos

Tercer día encuentro LMC América

LMCLa oración de la mañana marcó el inicio del día con una colorida dinámica que nos ayudó comenzar el día con mucho optimismo.

Los trabajos de este día fueron en 5 grupos para contextualizar y sintetizar los diferentes puntos acordados previamente.

La segunda parte de la mañana la hemos empleado para formarnos bien en el uso de nuestra página web: www.lmcomboni.org. El coordinador del comité central, Alberto de la Portilla, nos explicó a la Asamblea el correcto funcionamiento y las grandes ventajas y posibilidades que ofrece nuestra página web en sus diferentes campos. Nos anima a usar este medio para facilitarnos el trabajo, sobre todo, en la formación y en la comunicación.

Esta página es un valioso instrumento para comunicarnos y acceder todos los contenidos que nos puedan interesar para estar al día en todo lo que es la misión LMC y comboniana.

LMCLa tarde de este día la hemos empleado en la esperada visita al Santuario de la virgen de Guadalupe. Este acto constituyó toda una peregrinación del grupo LMC a este santuario mariano, emblema del pueblo mexicano.

La misa fue muy emocionante y muy participativa de todos nosotros. Fue presidida por el Provincial de México y concelebrada por los cuatro sacerdotes combonianos participantes al Encuentro.

Esta visita a Guadalupe constituyo una inyección de espiritualidad misionera a todo el grupo LMC.

Al finalizar, visitamos a las Hermanas Combonianas en su casa Provincial de La Villa. Con  ellas festejamos con mucha alegría la elección de su nueva Superiora General en el Capítulo que tienen en Roma.

LMC

(Valentín y Yessenia)

Segundo día de encuentro LMC America

rosario misioneroHemos comenzado el día con la misa de todo el grupo viviendo el compromiso con la acción misionera. Se resalta la idea que el LMC es misionero siempre, cuando está en su país y cuando sale fuera.

Las actividades del día comenzaron con el trabajo de grupos en base al cuestionario enviado previamente para este IV Encuentro. Cada grupo ha trabajado unos puntos del informe que se trajo para este Encuentro. En la puesta en común todos nos enriquecemos para comparar con lo que se hace en nuestro país. Siempre es enriquecedor ver lo que hacen otros para progresar en este campo. Cada secretario de grupo expone con claridad lo tratado.

En la segunda parte de la mañana retomamos el informe de los diferentes países a raíz de los acuerdos de Guatemala.

El grupo de Colombia no se encuentra presente en el Encuentro, sus aportaciones las han hecho por escrito y leídas por Alberto. Fisher, por parte de Perú, hace el informe que es seguido por un breve diálogo. México hace su informe muy bien presentado con algo de diálogo. La NAP presenta su informe mediante Yessenia que lo hace en representación de Paul Wheeler. Brasil hace también su informe por medio de Cristina, representante de Brasil y del equipo continental.

Guatemala presenta su informe por medio de Mirella, su coordinadora.

A continuación viene un trabajo de grupos para responder los aspectos que faltaban.

En el plenario, los grupos exponen lo acordado en los trabajos de grupo quedando trabajado todo lo acordado en el Encuentro de Guatemala. Después de cada exposición se sigue un fructífero diálogo de aclaración a lo tratado en el grupo.

Valentín y Yessenia de la O

IV encuentro continental LMC de América (18 – 24 de septiembre 2016)

LMC AmericaComenzó el Encuentro el domingo 18 con la presentación de estas jornadas por parte de la Coordinación Continental y por el P. Erasmo, Provincial comboniano en México. Luego tuvimos una original dinámica, que dirigió Leticia, para conocernos mejor como grupo. A continuación fijamos algunos cargos y responsabilidades prácticas para estos días.

Comenzamos el día lunes con la misa que tuvo mucho colorido misionero LMC latino. La Eucaristía ha de ser la fuerza para todo misionero, así lo pusimos de manifiesto con nuestra palabra y nuestros gestos en las ofrendas.

LMC AmericaLas actividades de la mañana estuvieron  marcadas por el recuerdo de nuestros  compromisos adquiridos en los encuentros anteriores, sobre todo, en el Encuentro de Guatemala, el cual sirvió para afirmarnos en nuestro compromiso como laicos. Revisamos los acuerdos tomados para vivirlos mejor en nuestros diferentes países. Los logros en estos años han sido notables, sobre todo, en las comunicaciones. Se requiere más compromiso de todos los combonianos y provinciales para que haya un buen seguimiento en todas nuestras provincias.

El Comité Central LMC nos expone su cometido internacional y sus funciones. Alberto, coordinador del C. Central, expone su  funcionamiento con mucha claridad recordando todo lo acordado en diferentes Asambleas Continentales. En la Asamblea de Maia se pusieron las bases de su actuación. Recuerda que debe haber mucha coordinación entre los diferentes agentes de la misión LMC.

Los LMC estamos presentes en 20 países.

Tenemos desafíos como LMC hoy en los diferentes continentes. Es básico clarificar nuestra relación con los MCCJ, a todo nivel. Se hace hincapié en el aspecto económico para que entre todos, miembros y países, seamos solidarios con los que tienen menos recursos. Es necesario que todos MCCJ y provinciales, tengan mucha capacidad de aceptación y colaboración con los LMC en todos los países. Tenemos desafíos importantes hoy como grupo en varios niveles, es importante tomar conciencia de ello y ser más coherentes todos.

LMC AmericaAlberto de la Portilla recuerda los desafíos:

  • Consolidar los grupos LMC en nuestros países y promover la vocación LMC.
  • Implicar a todos de una manera sistemática como familia LMC internacional.
  • Conseguir una comunicación fluida y más corresponsabilidad en las decisiones.
  • Llevar adelante los retos y compromisos de Maia.
  • Posibilitar la coordinación internacional estable.
  • Realizar un trabajo de fondo que ayude a crecer.
  • Procurar el estilo de Familia Comboniana que habría gustado a Comboni.

La reflexión de la tarde es sobre el cuidado de la creación y la vocación del laico en la Iglesia. Nos la presenta Cristina, del comité americano.

Los Laicos Misioneros Combonianos están llamados a continuar el estilo de Jesús al estilo de Comboni. Como LMC estamos llamados también a continuar la misión haciendo animación misionera.

Cada país presenta en la tarde, las respuestas al cuestionario enviado previamente a cada coordinador: Colombia, Guatemala, México, Perú, NAP, Brasil. En la noche Perú presenta dos interesantes testimonios; Arequipa y Trujillo.

(P. Valentín García y Yessenia de la O)

 

Mi experiencia en los Andes peruanos

Adriana en PeruHola. Quiero platicarles de mi experiencia personal con los niños en la montaña de la sierra Andina, en mi trabajo de Misión que duro 6 años. Esos niños pastorcitos que desde pequeños son responsables de diversas tareas y que decir de las niñas quienes están encargadas de cuidar de los pequeñitos y hasta los atan a sus espaldas con su mantita cuando salen a jugar, son ingeniosas pues de unas piedritas y una canica hacen un juego de matatena.

Los niños llevan los borregos a pastar cerca del río, antes de ir a la escuela (que muchas veces se encuentra lejos de su poblado), también ayudan en la parcelas de la familia y en la de la escuela, a sembrar, limpiar el surco y cosechar. El principal alimento es la papa y varios tipos de tubérculos como la zanahoria, oca, olluco, camote, yacón y maca, ya que por ser montañas tan altas solo germinan vegetales bajo tierra.

La vida de los niños no es fácil, pues la mayoría no viven dentro de una familia integrada, algunos papás salen a la selva a trabajar (donde se siembra la coca) y no se sabe de ellos en 10 y/o hasta 15 años, ya que se unen con otra mujer con la que tienen más hijos y solo vuelven cuando los hijos están grandes y los llevan para que les ayuden a trabajar, (esto causa graves heridas y resentimientos en los jóvenes); Por la necesidad la mama se va a la ciudad para trabajar como empleada doméstica y deja a los niños con la abuelita y ellas (las mamás) también en la ciudad se hacen de ¨compromiso con otro hombre¨, la mayoría de las abuelitas hablan quechua y su actividad es cuidar animales, sembrar para poder comer y no es prioridad para ellas mandar a los niños a la escuela porque es mejor que les ayuden en el campo. Conocí a una profesora, que una vez iniciado el calendario escolar, se la pasa quince días visitando casa por casa de sus alumnos para convencer a las abuelitas que permitan a los niños ir a la escuela.

Les comparto que mi padre falleció estando yo en misión y me avisaron al tercer día de que esto sucedió y ya lo habían sepultado, yo estaba trabajando con los niños y lo único que pensé fue en dar gracias a nuestro Señor por haberme concedido un buen padre, cariñoso atento y respetuoso con todos sus hijos (fuimos 10) y que yo contaba con su bendición y apoyo moral en este trabajo; (ya que con los niños que estaba en ese momento la mayoría difícilmente disfrutaron de un papa).

Hay momentos desesperantes y tristes como cuando Susy, una niña que por ayudarle a su mama a cocinar se quemó con el agua hirviendo detrás de la rodilla y en la posta médica le disminuyeron el número de curaciones, porque solo con ella se iban a terminar las gasas que tenían en existencia y no tenían la pomada que necesitaba. Esto me permite reflexionar y solicitar capacitación y preparación en primeros auxilios. Conocer sus cultivos y/o plantas que se dan es esa población y ver si algunas de ellas son medicinales.

En la misión me toco conocer a una pequeñita que de antes estaba infestada de hongos en el pecho y falleció por las condiciones insalubres de su vivienda. Dormía en el suelo sobre pieles de borrego, su casa muy oscura estaba ubicada por donde bajaban todas los canalitos de agua sucia del pueblo y por lo tanto muy húmeda, todo esto favoreció a que empeorara su salud. Y posteriormente falleciera. El pudor y la falta de confianza, así como la ignorancia fue motivo para que su enfermedad no fuera atendida en tiempo.

En otra ocasión tuve la necesidad de llamarles la atención a los niños por jugar futbol con una naranja, ya que el suelo está infectado por las heces del puerco y en cuanto termina el recreo levantan la naranja, la pelan con sus manitas sucias y se la comen entre los que participaron en el juego. ¡Pero es que no conocen de pelotas!

Los niños o niñas, cuanto acompañan a sus mamitas al río a lavar la ropa es cuando aprovechan para tomar un baño.

Son niños acogedores, ya que cuando llegamos las misioneras al pueblo corren a preparar una bebida caliente para ofrecernos con un panecito. Y cuando les ayudas, como gesto de amistad te invitan de sus habas tostadas que guardan en la bolsa del pantalón, ello en señal de agradecimiento

También un día en que íbamos caminando por la plaza, una pequeñita de 5 años nos gritó desde el otro extremo de la plaza ¡Dios te bendiga misionera! Imagínense que sentimiento tan lindo nos transmitió a nosotras como misioneras, que iniciábamos el trabajo del día.

AdrianaComo ellos no tienen juguetes, televisión ni celulares, conviven con sus amigos y hermanos, se cuidan entre ellos. Les gusta participar en la fiesta del pueblo a donde asisten personas de los caseríos y poblados de alrededor del pueblo. Hay una danza que celebran en muchos pueblos y le llaman Auquidanza donde hacen una representación de la muerte del Inca, por el conquistador Pizarro y las mujeres cantando ruegan por la vida del inca Es una bonita experiencia.

En varios pueblos el 25 de Diciembre los niños acuden a adorar al niño Jesús danzando y cantando.

Me admira la firmeza de sus convicciones, ya que cuando invitaron a Luis, un niño que asistía a la Iglesia,  a participar de una broma con mentiras, él se negó diciendo que no podía mentir, ya que iba a recibir a nuestro Señor Jesucristo en su primera comunión.

Un día toca a nuestra puerta un niño de 5 años llevando de la mano a su amiguito de 7 años que lloraba inconsolable, ya que se colgó del autobús que iba llegando y se cayó golpeándose la frente de donde emergía un gran chipote, esto  para que lo atendiéramos, nosotros dimos la instrucción de que acudiera con su mamá para que lo llevara a atender a la posta médica, el niño lloraba más fuerte del miedo al castigo de la mama, (Existe mucha violencia intra-familiar y en el ambiente, ya que al entrar a cada salón, se encuentra el cinturón o un palo encima del escritorio del profesor para establecer la disciplina). Mi  querida compañera misionera  Josefina, le aplico una rebanada de cebolla sobre la frente y el niño lloraba inconsolable, le ofrecimos una taza de chocolate y al tomar la bebida se le resbalo la cebolla en la taza lo que provoco la risa de los presentes y del niño accidentado, esto lo hizo olvidar el incidente. Todos quedamos impresionados de la solidaridad del pequeñito que nos trajo a su amigo para que lo curásemos.

Es muy lindo trabajar con los niños, ya que asimilan muy rápido las novedades y muchas veces lo que aprenden quieren implementarlo en su hogar.

Intentar darles felicidad a los pequeñitos, no es difícil, ya que no son exigentes y son muy agradecidos.

Y que te digo de mis “patas” los jóvenes, que sufren tanto por ir a buscar trabajo en la ciudad, durmiendo en los parques, sin que comer y solo adquiriendo enfermedades.

Una vez llegaron unos ingenieros al pueblo que iba a abrir una brecha por la montaña, atrajeron a los jóvenes invitándolos a comer a la fondita del pueblo y ofreciéndoles trabajo y buena  comida durante el periodo de trabajo, ellos se entusiasmaron y aceptaron, caminaron lejos por un gran cañón y  los obligaban a andar por laderas muy empinadas para medir los tramos, con peligro de caer de la montaña, pero como era época de lluvias se les mojaron las cobijas y la leña, solo comían papa cruda y fideos remojados, a media noche del tercer día escaparon y uno de ellos lloraba diciendo, que pecado habían cometido para merecer ese castigo, otro de ellos llevaba una taza de aluminio y la llenaban de agua de los manantiales para beber y eso les ayudo a regresar a su casa.

Son chicos entusiastas y sensibles, pero también su trabajo es muy pesado.

Ellos te esperan para que les comuniques la Buena Noticia.

Con cariño

Laica Misionera Comboniana de Guadalajara, Jalisco, México

Adriana Margarita Salcedo Cabello

Campo misión en Semana Santa.

Campo mision MexicoConfirmamos que Dios es ternura y misericordia y que los jóvenes están muy comprometidos con la gente que sufre.

El grupo LMC de Guadalajara atendimos a la invitación de los padres Gustavo Covarrubias y David Tena, para asistir al campo misión 2016, en Tala Jalisco. Nos integramos con el grupo juvenil éxodo. La preparación se llevó a cabo algunas semanas antes por medio de lecturas y un retiro espiritual durante el cual acordamos con los jóvenes y los padres el programa de trabajo. Reconocemos la buena logística pues nos entregaron horarios, material y rosarios benditos para ofrecerlos a los enfermos; así como las instrucciones por si alguien quería confesarse, recibir la comunión o la extrema unción.

Durante la Semana Santa, por las mañanas acudíamos de forma individual cada quien a un centro de catequesis para apoyar a las catequistas en la exposición del tema central que fue la misericordia, hacíamos dinámicas y tareas con los niños. A media mañana, nos dividíamos en equipos de 6 o 7 personas para ir al hospital, asilo o centro penitenciario respectivamente.

En el hospital visitamos a los pacientes en su cama individualmente, hacíamos oración y cantos. Los enfermos agradecían nuestra presencia, algunos nos compartían sobre su enfermedad y la relación con su familia. Al principio, los jóvenes entusiasmados querían hacer actos de magia y vestirse de payasitos pero no se pudo, aún así hacían sentir un ambiente muy alegre.  Llegamos a pasar hasta más de una hora con algún paciente que no quería que lo dejáramos de escuchar.  Llevamos cartas de aliento a los enfermos y de felicitación a las señoras que acababan de tener a su bebé.

Campo mision MexicoEn el asilo, de igual forma, saludábamos y reuníamos a los ancianos, hacíamos oración y dinámicas para conocernos, leer la biblia, o jugar algún juego de mesa como la lotería. La gente tuvo mucha apertura y confianza para compartir sus dolores, sus alegrías y lo que estaban viviendo. Se notó siempre la ayuda del espíritu santo para iluminarnos con palabras de amor y de paz.

En el centro penitenciario sólo nos autorizaron convivir con un grupo de presos. Con ellos hacíamos dinámicas y reflexiones sobre pasajes de la escritura como el hijo prodigo, la crucifixión y muerte de Jesús. Una actividad fue leer la carta que la presa de Cd. Juárez dirigió al papa Francisco. Algunos recibieron el sacramento de la confesión y el Padre David celebraba la eucaristía. Al terminar la visita, comíamos algo con ellos para fomentar la convivencia. Se notaba que les alegraba nuestra presencia, les daba esperanza y ganas de seguir adelante.

Campo mision MexicoPor las tardes, las familias del pueblo nos recibían en sus casas para darnos de comer, ofreciéndonos siempre lo mejor que ellos tenían. Después de comer nos trasladábamos a la capilla que nos correspondía en grupos de tres o cuatro para dar charlas a jóvenes y adultos sobre el triduo pascual y la misericordia de Dios, durante las cuales hubo muy buena participación.

Cada una participó en las actividades del triduo pascual en las diferentes capillas; sólo algunos nos reunimos el viernes durante la participación en el viacrucis en la parroquia del centro. Esta experiencia fue muy agradable, el haber conocido jóvenes sanos con ideas muy solidarias y que expresaban mucha ternura. También creemos que ellos estuvieron muy contentos de interactuar con nosotras y con todo el trabajo que realizamos. Nos adaptamos al trabajo en equipo y había responsabilidad en su forma de trabajar, eran muy activos y atentos, compartían su alegría, bailando, cantando y gritando. Nos quedamos con esa dulzura de saber que si siguen perseverando con esa entrega y amor, llegaran muy lejos en el amor a Dios y a sus hermanos.

Campo mision Mexico

Adri, Oli y Mire. LMC México