Este vídeo de 5 minutos presenta lo que se ha realizado en este último año por la red “Iglesias y Minería”, en la que hay una gran implicación de la familia comboniana (entre ellos nuestros LMC).
Experiencias misioneras
Noticias de los LMC Liliana y Flávio – Fiesta de la cosecha en Piquiá, Brasil
El pasado domingo 9 de junio se realizó la Fiesta de la Cosecha en la comunidad San José del asentamiento João do Vale de la parroquia Santa Luzía de Piquiá (Brasil), que contó con la presencia de más de 1000 personas de las diferentes parroquias de la ciudad de Acailândia y del Obispo de la diócesis de Emperatriz D. Vilson Basso.
El objetivo de esta gran fiesta, que ya llegó a su 10ª edición, es celebrar el don de la cosecha y reflexionar sobre la tierra como lugar de trabajo y medio de subsistencia de las familias, recordar sus luchas y reclamar la justicia en el derecho a la tierra y en el respeto de la creación.
El tema de este año fue “Agricultura familiar en defensa de la vida” y el lema “Cultivar y guardar la creación” Gn 2: 15.
La fiesta se inició con la acogida en la cancha deportiva del asentamiento y con un desayuno especial preparado en base a los productos retirados de la tierra (mandioca, calabaza y diversas frutas) provenientes del compartir las diferentes comunidades que se hicieron presentes. Después, siguió la celebración de la eucaristía, donde el obispo D. Vilson Basso habló de la importancia de la agricultura familiar y del deber de luchar por la tierra y denunciar a aquellos que la quieren usurpar. Reforzó la importancia de no desistir por tratarse de una lucha justa y de la necesidad de que todos estén unidos. Recordó a los 10 trabajadores rurales asesinados en una hacienda en el Estado de Pará (https://www.cptnacional.org.br/index.php/publicacoes-2/destaque/3794-chacina-em-redenca-pa-deixa-pelo-menos -10-posseiros muertos) y de todos aquellos que son perseguidos y presionados para dejar sus tierras.
En el momento del ofertorio las diferentes comunidades presentaron algunos de sus productos agrícolas en el altar del Señor en señal de agradecimiento y con la esperanza de una relación más respetuosa entre la humanidad y la creación.
Después de un almuerzo compartido siguieron varias presentaciones culturales, desde teatro, danzas tradicionales y juegos, terminando con la entrega de una muda de Ipê a cada comunidad y el anuncio de la comunidad donde se celebrará la fiesta de la cosecha el próximo año.
Liliana Ferreira y Flávio Schmidt LMCs en Brasil
Visita del General de los Combonianos a Piquiá (Brasil)
El 31 de julio recibimos aquí en la misión de Piquiá, en Maranhão, la visita del general de los misioneros combonianos, P Tesfaye Tadesse, acompañado del provincial de Brasil, p. Dario Bossi. Se unió a nosotros para este momento la comunidad comboniana de Balsas, que también se encuentra en Maranhão.
Siento que fue un momento importante para el general “tocar con las manos” la realidad de esta misión, sobre todo del pueblo de Piquiá de Baixo, que busca el reasentamiento del barrio.
¡También fue un momento importante de convivencia y compartir como familia comboniana! Hemos tenido la oportunidad de compartir sobre nuestras actividades y perspectivas.
La visita concluyó con una misa solemne el día 02 de agosto por la noche, con gran participación de las comunidades, no sólo de la parroquia de Santa Lucía, sino también de San Juan Bautista, antigua parroquia comboniana. Después de la celebración, hubo un momento de convivencia entre todos.
Fue hermoso ver el cariño de las personas por la presencia e historia de los misioneros combonianos en esta misión.
¡Recemos siempre por las vocaciones, combonianas y de toda la iglesia!
Flávio Schmidt, LMC Brasil
Escuela de Verano en Etiopía
¿Cuál es la mejor manera de pasar las vacaciones? Esta pregunta no estaba en la cabeza de los niños que viven en el barrio de la clínica en la que trabajo. Vienen principalmente de familias pobres y grandes y sus padres no pueden permitirse ninguna actividad de vacaciones para ellos. El tiempo pasa mientras se aburren. Nosotros decidimos sacarlos de este verano ocioso.
Usando su tiempo, que tienen en abundancia, y con los medios económicos recibidos del grupo de los Laicos Misioneros Combonianos de Polonia, tratamos de prepararles algo divertido y útil al mismo tiempo. Organizamos una escuela de verano. 80 niños y niñas de entre 12 a 18 años participaron en ella. Los niños se dividieron en tres grupos: los niños mayores y las niñas por separado y los estudiantes más jóvenes – juntos. Cada grupo asistió a un programa de una semana.
Empezamos cada día con la oración del ” Padre Nuestro”. Durante las clases se les enseñó sobre alimentos nutritivos, higiene, protección del medio ambiente, método de planificación familiar y primeros auxilios. Se les enseñó acerca de los problemas que enfrentan los adolescentes es decir: adicciones, SIDA, enfermedades de transmisión sexual, abortos, mutilación genital femenina y matrimonios prematuros forzados.
Con el fin de aprovechar mejor el aprendizaje de las lecciones muchas se llevaron a cabo como actividades al aire libre: ejercicios prácticos o juegos. Después de las clases sobre comida nutritiva los niños fueron a hacer un poco de jardinería, donde aprendieron cómo hacer plantones y plantar verduras. Al final de la lección de higiene se distribuyeron cepillos de dientes y dentífricos y todos los niños se cepillaron los dientes. Durante el taller de primeros auxilios, cuando se mostraban películas cortas de “qué hacer”, seguían los ejercicios prácticos, donde los jóvenes estudiantes desempeñaban el papel de personas desmayadas, quemadas y ahogadas, así como de sus salvadores. Durante uno de los juegos aprendieron a comportarse adecuadamente frente a diferentes situaciones – por ejemplo al ver a una persona blanca cómo era mejor saludarla en lugar de llamar “Tu, Tu ,Tu”. Lo que aprendieron durante toda la semana lo pintaron durante la última lección.
Una de las clases concernía a la creación del mundo. Se mostraron imágenes que demuestran la belleza del mundo creado por Dios, como los maravillosos paisajes de Etiopía, una hermosa puesta de sol en el lago Awassa (el lado donde viven). Justo después de eso se presentaron fotos de la basura esparcida en su vecindario. Después de este breve taller fuimos todos motivados a recoger la basura del complejo de la clínica.
Durante el receso escolar cada estudiante recibió un paquete de galletas. Cada niño recibía un almuerzo diario nutritivo: injera (comida típica) con verduras diferentes, lo que podría ser considerado como un buen ejemplo de comida nutritiva que aprendieron durante estas clases. La escuela terminó con una ceremonia oficial de graduación, donde se distribuyeron los certificados de asistencia. Cada estudiante recibió como regalo un conjunto escolar compuesto de libros de ejercicios, un bolígrafo, un lápiz y un afilador, lo que para muchas familias fue una reducción significativa de los gastos del hogar. Además, doce de los estudiantes más activos recibieron un conjunto de matemáticas extra (compás, regla, escuadra y cartabón).
A todos les gustó mucho la escuela. Los maestros estaban contentos de que los estudiantes estuvieran tan interesados en todos los temas. Los niños ya están esperando otra escuela de verano el próximo año.
“Comparta la alegría del Evangelio” – Retiro anual de los Amigos de Comboni en Etiopía
Addis Abeba, 30 de julio de 2017
“Comparta la alegría del Evangelio” – Retiro anual de los Amigos de Comboni en Etiopía
“Nadie está excluido del gozo traído por el Señor”
“¡Oh Dios, tus caminos son santos!
Tú eres el Dios que hace maravillas”
(Sal 77: 13a.14a)
Los días 21 y 23 de julio de 2017, celebramos en el postulantado Comboniano de Addis Abeba nuestro retiro anual como Amigos de Comboni de Etiopía. Yo estaba realmente deseando esta oportunidad de orar, adorar, programar y fortalecer nuestra amistad.
Este es siempre un momento especial para mí: salir de la oficina y alejarme del bullicio. Yo dije: “Señor, tus caminos son santos”. A principios de este año, fui a un retiro de silencio durante una semana. ¿Qué mejor, pensé, que una semana de silencio para un introvertido? Así que fue un poco de decepcionante cuando me enteré de que el retiro de amigos de Comboni no sería en completo silencio. Pero Dios me siguió sorprendiendo y me hizo reír.
¡Comparte la alegría del Evangelio!
Quedé muy contento con el retiro de los Amigos de Comboni. Durante la reunión del fin de semana nos sentimos como una familia. Oramos juntos, comimos juntos, trabajamos juntos. Preparando comidas, lavando platos, jugando, hablando… ¡Hacer todo juntos fue muy divertido! El sábado por la tarde salimos a realizar juegos bíblicos en la calle y me gustó mucho esa idea de compartir la Alegría del Evangelio con otros.
“Con esto todos sabrán que sois mis discípulos, si os amáis unos a otros”. Continuamos nuestras actividades de retiro en la Casa de las hermanas de la Madre Teresa, donde nuestro grupo se involucró este año con un voluntariado mensual. Era la primera vez que visitaba el recinto y cuando una de las hermanas nos guiaba a través de diferentes departamentos del centro me vino a la mente una idea: cada cristiano y cada comunidad estamos llamados a ser un instrumento de Dios para la liberación y la promoción de los pobres, y para que puedan ser parte plena de la sociedad. Esto requiere que estemos atentos al grito de los pobres y que acudamos en su ayuda. La alegría del Evangelio llena los corazones y las vidas de todos los que se encuentran con Jesús. Aquellos que aceptan su oferta de salvación son liberados del pecado, del dolor, del vacío interior y de la soledad. Con Cristo la alegría nace constantemente de nuevo.
El Papa Benedicto XVI escribió: “La fe es un don que se nos da para ser compartido”. Mi oración y esperanza es que cada miembro de los Amigos de Comboni en Etiopía esté dispuesto y comprometido a poner esas palabras en práctica. La tarea de cada uno de nosotros es vivir lo que creemos. Esta es la forma más importante de difundir y fortalecer nuestra fe.
Durante el retiro, los Misioneros Combonianos trabajaron duro para compartir la alegría del Evangelio “en hechos y en palabras”. Les agradecemos lo que hicieron por nosotros y oramos por ellos, especialmente por el padre Juan, responsable de los laicos misioneros combonianos en Etiopía, p. Sisto, Superior de la Provincia de Etiopía y los Laicos Misioneros Combonianos polacos que trabajaban en Etiopía, quienes reactivaron el grupo de Amigos de Comboni en Etiopía. “Su buena obra será mostrada a toda la humanidad” – queridos misioneros laicos, nos regocijamos de que nuestro Padre Celestial haya hecho esto posible, y agradecemos a nuestro Padre Celestial por su trabajo.
Tesfalidet Lelisho