El domingo 29 de noviembre tuvimos la oportunidad de ser parte de las sesiones formativas de los jóvenes que participarán en la obra misional de la arquidiócesis de León durante el mes de diciembre (Misiones PROJUV, León, Guanajuato). Nos invitaron a dar una conferencia en la que hablamos de las principales cualidades que debemos tener como misioneros. En ella, compartimos algunas ideas y ejemplos de cómo las virtudes de la humildad, la coherencia, la pureza y la generosidad nos pueden ayudar a entregarnos plenamente al servicio de Dios y de nuestros hermanos.
Para nosotros fue una experiencia muy especial, porque se trató de la primera actividad que hemos tenido representando a los Laicos Misioneros Combonianos. Nos encontramos en nuestro periodo de formación, en el que nos preparamos espiritual e intelectualmente para responder a la llamada misionera que Dios ha puesto en nuestro corazón. Por eso, tener la oportunidad de compartir un poco de lo mucho que hemos recibido nos llenó de alegría y esperanza.
La interacción con adolescentes y jóvenes adultos fue muy enriquecedora. Además del contenido de nuestra conferencia, el diálogo con ellos nos hizo caer en cuenta de que el sólo hecho de presentarnos como un matrimonio de laicos misioneros es ya un ejemplo que los puede inspirar a comprometerse plenamente con la vocación de compartir el Evangelio. Muchos se acercaron a compartirnos sus inquietudes vocacionales, y para nosotros fue un honor mostrarles cómo es posible ser laicos comprometidos, trabajando en el mundo con la mirada puesta en el Reino del Cielo.
Esta experiencia nos ayudó a confirmar que el Señor nos llama en cualquier momento de nuestra existencia y desde cualquier camino de vida. Nosotros, como matrimonio, sabemos que este llamado adquiere un sentido profundo al saber que nuestro amor conyugal puede y debe ser vivido como testimonio para dar a conocer el amor de Dios en todo lugar. ¡Atrevámonos a responder a este llamado!
El sábado 01 de agosto del 2020, solemnidad de San Alfonso María de Ligorio, los Laicos de diferentes puntos del país de México, celebramos un encuentro nacional, para compartir nuestra vivencia a partir de la pandemia. Participaron laicos de: Michoacán, Guanajuato, Guadalajara, Morelos y Ciudad de México, acompañados de nuestro asesor nacional: Gustavo Covarrubias MCCJ. Iniciamos con una oración para impulsar el espíritu misionero, a partir del profeta Naum 1, 7. Posteriormente compartimos la manera en que estamos viviendo nuestra vocación de Laicos Misioneros Combonianos.
Fuimos iluminados por la realidad, meditando los diferentes escenarios sociales, políticos y familiares, a los que nos enfrentamos y la manera en que podemos vivirlos tal y como San Daniel Comboni lo hubiere hecho. Tomando como tres estrategias: La oración, la solidaridad y la cooperación y ser signos de Esperanza en el mundo. Posteriormente meditamos la Palabra de Dios para traducir en compromisos concretos en nuestra labor misionera: La oración, salir al encuentro con el otro, ir poco a poco trabajando jornadas misioneras, dando siempre prioridad a la salud de todos, teniendo como referente lo valiosa y digna que es la vida humana.
Por último, compartimos el panorama de la misión a nivel internacional y cerramos con un momento de oración para invocar la protección maternal de Nuestra Madre María de Guadalupe, comprometiéndonos a seguir consolidados como una sola familia misionera comboniana.
“Sin los laicos el trabajo de la misión es estéril” (EC 1219).
Extraordinarios en su acción, bautizados y enviados
Haciendo eco al
mensaje del Papa Francisco de vivir un tiempo extraordinario en el mes de
octubre, en el cual se celebra la
Jornada Mundial de las Misiones, el Seminario Comboniano de San Francisco del
Rincón, Gto., realizó la reunión anual de las Damas y Colaboradores
Combonianos.
Procedentes de
varios municipios del Estado de Guanajuato y de Jalisco, alrededor de 350
personas llegaron desde muy temprana hora para compartir este día de alegría,
oración y encuentro entre todos los presentes: sacerdotes y hermanos
combonianos, seminaristas, religiosos, laicos y sobre todo, amig@s que
comparten la misma pertenencia filial a
Dios como un acto eclesial, que es comunión, y que es fuente de una vida nueva junto a
tantos otros hermanos y hermanas. (Mensaje del santo Padre Francisco para
la Jornada Mundial de las Misiones 2019). Una de las damas combonianas expresó: “venir aquí, es sentirme en casa”.
Ellos son como el
mismo Papa Francisco lo dice, “Una
Iglesia en salida hasta los últimos confines
y que exige una conversión misionera constante y permanente”. Tal
vez, ellos no van a salir de su tierra a proclamar la misión, la Gran Obra de
Misericordia de Jesucristo, pero están en constante salida para encontrar al
otro y solicitar apoyo para los que son destinados a dar testimonio de la
visión profética de la Iglesia en tierras lejanas.
Un gran ejemplo
de esta iglesia en salida, de conversión constante y permanente, es la Señora Macaria Bendita, dama comboniana
del grupo de Dolores Hidalgo Gto, que por casi 50 años ha llevado su sobrecito
a sus conocidos y amigos para invitarlos a rezar y a apoyar económicamente a
las misiones. Comentó que ha sido una gran alegría para ella y su familia
participar en esta obra.
Posterior al
momento de la bienvenida y el café, todas las personas fueron invitadas a
escuchar los testimonios, y a participar en un momento de dinámicas y cantos
misioneros. “Que hermoso es ver sobre los
montes al mensajero que anuncia la paz”, (Is. 52,7). Estas palabras parecen
tomar vida al observar los rostros de las damas y colaboradores combonianos que
con gran atención y entusiasmo, escucharon los testimonios misioneros de los
Padres Combonianos Mario Alberto Pacheco Zamora y José Arellano. Ambos padres
tenían mucho que compartir de su experiencia y vida en las Filipinas y en
Egipto, respectivamente.
Estos
testimonios son fuente de alegría y deseos de seguir trabajando por la misión,
comentó la misma señora Macaria.
Durante uno de
los momentos de la Eucarística, el Padre Enrique Sánchez reconoció, agradeció y
exhortó la labor de las damas y colabores, diciéndoles: “Con su oración, sacrificio, trabajo, cariño y con esa monedita para
las misiones que ustedes dan, son como las ruedas del carro, como una hormiguita
que con su trabajo anónimo y discreto, no saben el bien que les hace a los
misioneros, les permite vivir la
vocación sin preocuparse por el mañana; son lo que hace posible que los combonianos
sigan adelante llevando la buena noticia a muchas naciones del mundo”.
Posterior a la
Eucaristía siguió el compartir de los alimentos, la partida del pastel, las
rifas y la música. Aquí se pudo observar la comunión y fiesta que este
encuentro ocasiona. Les hace sentir importantes y reconocidos en su labor, y
como dijo el Señor Armenta, colaborador del grupo de San Felipe, en familia.
El ejemplo de
estas damas y colabores combonianos nos invita a todos a reflexionar sobre
nuestro propio significado de ser bautizados y enviados. Aquél importantísimo mensaje que hace 100 años
el Papa Benedicto XV emitiera en la encíclica Maximum Iut, refiriéndose al mandato misionero Vayan por todo el mundo, proclamen
gratuitamente el don que hemos recibido sin excluir a nadie, sigue teniendo
gran relevancia en nuestra sociedad actual. No tenemos que anunciar el
evangelio para hacer “conquistas” como en épocas de colonización, sino con la
convicción de que nuestra adhesión de fe a Jesucristo, vivo y resucitado, es
una riqueza para dar, para comunicar, para anunciar.
El pasado 17 y 18 de agosto se llevó a cabo el retiro de información para que nuevas personas conocieran el carisma Comboniano como Laicos Misioneros. Tuvimos la participación de aproximadamente 30 personas, quienes venían de Tabasco, Michoacán, Jalisco y Guanajuato. Dimos inicio con una dinámica de integración y con un poco de animación, después pasamos a vivir nuestro primer taller impartido por el LMC José Dolores (Lolo) quien nos dió 7 tips para conseguir nuestra paz interior, después vivimos con gran alegría una hora santa en donde experimentamos fuertemente la presencia de Dios, para finalizar la primer etapa proseguimos con la cena y finalmente realizamos una fogata para convivir en comunidad y contar algunas experiencias de misión que han marcado nuestra vida y nuestro corazón como misioneros. Al día siguiente iniciamos una oración en comunidad para ofrecer a Dios nuestra familia y nuestra misión, después tuvimos un taller impartido por el LMC Juan José, quien nos habló sobre la Espiritualidad Comboniana, proseguimos con la celebración eucarística quien nos llenó de emoción y alegría, celebrada por el Pbro. Lalo quien actualmente trabaja en República Democrática del Congo, África, dentro de la homilía él nos contó un poco sobre su experiencia en este lugar y nos dejó muy emocionados con el mensaje que nos dio, después, tuvimos una pequeña presentación sobre el trabajo, formación, promoción, misión, etc. como Laicos Misioneros Combonianos a nivel mundial a cargo de la LMC Daniela Becerra quien también se encargó de darnos un pequeño tour por Kenya, África. Después los Laicos Lolo y Maricruz nos contaron un poco sobre su experiencia en este lugar y nos enseñaron sobre el idioma suajili, delante de esto, la LMC Verito Arenas (coordinadora de los LMC en San Fco. del Rincón.) nos compartió sobre el trabajo que se realiza a nivel local como LMC.
Posteriormente, el grupo se dividió en dos partes para escribir su carta compromiso, un grupo acompañado por LMC Beatriz (Formación Nacional) este grupo lo integraron los LMC que ya han cumplido con la formación básica de dos años, escribieron su petición a la coordinación de los LMC de México para poder trabajar permanentemente un año más al servicio de la comunidad; y el otro grupo, integrado por los nuevos invitados a ser LMC recibieron un testimonio misionero impartido por la LMC Adriana (Coordinadora Nacional) quien dio su experiencia de vida del tiempo que estuvo trabajando en Perú. Después de realizar su carta se volvieron a reunir los dos grupos para que los de nuevo ingreso pudieran ser testigos del compromiso que cada LMC hizo, la alegría y emoción que invadía en ese momento fue tanto que hasta algunos se conmovieron mucho por este acto. Después de abrazos y felicitaciones por los nuevos Laicos Misioneros Combonianos dimos por terminado nuestro retiro con una pequeña convivencia donde compartimos la alegría de lo experimentado en estos dos días.
Agradecemos a todas las personas que participaron en este grupo y el apoyo recibido por algunos bienhechores, seguimos orando por todos ustedes, por los nuevos Laicos y por las vocaciones para las misiones…
Soy Mónica Cervantes Suarez, tengo 18 años, nací en la ciudad de Sahuayo Michoacán. Estoy por iniciar la universidad en la licenciatura de medicina integral. Quiero compartir con ustedes mi experiencia en este camino misionero. A partir de no ser admitida en la carrera que deseaba comencé a buscar algo que llenará ese hueco que sentía ya que era muy alejada de las cosas de Dios, aún cuando mis papás asisten a los movimientos familiares dentro de la Iglesia, yo mantenía mi distancia en todo eso.
Confieso que, si tenía la
inquietud de misionar un tanto por la curiosidad de conocer culturas y
tradiciones diferentes, más que nada por aventura, recorrer nuevos lugares, etc.
Tuve la oportunidad de participar en un congreso nacional misionero de niños y
adolescentes, cuyo lema era “CON JOSELITO EN EL CORAZÓN MISIONEROS DE
VOCACIÓN”. Ni yo misma entendía lo que estaba haciendo en ese lugar, al
principio me sentía rara, pero todo en mí cambio al tomar conciencia que debía
descubrir mi misión en la vida.
Después de
esta experiencia, tomé la decisión de contactarme con Beatriz LMC, que dio el
tema de la Vocación Misionera y su testimonio de vida, en el Congreso; para
solicitar participar del campo misión y dándome una respuesta positiva comencé
con la formación para participar en el Campo Misión de Semana Santa, con mucho
entusiasmo esperaba el día de partir, pero cuando llego el momento sentí miedo
y a la vez alegría porque había llegado lo que por tantos años había esperado.
Llegamos a
la parroquia de Metlatonoc, en la comunidad de Vicente Guerrero, que fue donde
me toco estar esta semana. Pasamos diferentes retos para llegar al lugar, un
viaje largo, subidas intensas donde tuvimos que bajar del carro y caminar hasta
llegar a la comunidad. Ya estando en la comunidad tuve la oportunidad de
descubrir que sientes más alegría al dar que recibir, además, el misionero
también aprende de las personas de la comunidad, que nos acogieron con alegría
y entusiasmo abiertos a trabajar en equipo, siempre estuvimos trabajando con
las muchachas, formamos tres equipos para dividir los temas y las celebraciones
litúrgicas ya que por falta de sacerdotes no tuvimos eucaristía pero si
organizamos la celebración de la palabra, en donde fui elegida para dirigir la
“Vigilia Pascual”; sentía una gran responsabilidad y el querer que todo salga
bien me hacía tener nervios pero al terminar me llego la Paz y la alegría de a
haber vivido tan bonita experiencia, sin duda el Señor supo seducirme y
atraparme para que siguiera sirviendo. A mi regreso pude ver la vida de forma
diferente buscando siempre el lado positivo de las cosas. Seguí participando en
las actividades misioneras y las reuniones que me han ayudado a ir descubriendo
mi vocación.
Acabo de
vivir otro Congreso Nacional Juvenil Misionero en el mes de julio en
Villahermosa, Tabasco. México. Cuyo lema me invita a salir de mi misma “JOVENES
DE CRISTO A LAS PERIFERIAS DEL MUNDO”, ahí pude compartir experiencias con
personas de mi edad, que al igual que yo tienen inquietudes por descubrir su
camino a la vida de servicio a la vida de misión.
Ahora espero con ansias el retiro de
información que se realizará en el seminario Comboniano de San Francisco del
Rincón, Gto. México. Para iniciar el proceso de formación como Laica Misionera
Comboniana, ya que me siento identificada con el carisma misionero de San
Daniel Comboni.
Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Si continúa navegando consideramos que acepta el uso de cookies, pero puede optar por lo contrario si lo desea.
This website uses cookies to improve your experience. If you continue to browse we consider you accept the use of cookies, but you can opt-out if you wish. Acepto Puede obtener más información - You may have more information here
Politica y privacidad de Cookies - Privacy & Cookies Policy
Privacy Overview
This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.