Motivados por conocer las diferentes experiencias de cada país y buscando una respuesta común en nuestras luces y sombras, reflexionamos que el camino es el mismo, pero con matices diferentes.
Al caminar, escuchar y ser nosotros mismos, permite a los LMC profundizar el sentido de apertura con el más lejano, el olvidado, el necesitado cuestionándonos la realidad del ser LMC.
En nuestro tema de formación impartido por el padre Juan Goicochea MCCJ; nos sitúa en el tiempo que esta nuestra iglesia, de escucha, en donde se nos presentan los desafíos sociales y eclesiales para América latina y el Caribe; también es el tiempo de abrir los brazos y abrazar al mundo. Es necesario despertar a esta realidad mundial, para tener razones concretas a nivel local.
Si continuamos con el pensamiento individual, no se pueden hacer acciones concretas.
La noche complemento los temas del día con la experiencia misionera de Rossie (LMC Estadounidense) y Ewelina (LMC Polaca) dos jóvenes con presencia misionera permanente en Arequipa, quienes todas las mañana apoyan una cuna con niños de 5 años y en las tardes realizan su apoyo a la parroquia junto con la comunidad, ellas han sido un verdadero testimonio de servicio misionero por el estilo de vida comunitaria que llevan, apoyadas en la oración diaria y una excelente comunicación que les permite ser un verdadero testimonio misionero en la comunidad.
Que vamos a hacer desde el continente americano, para que la familia de laicos misioneros Combonianos visualicen sus campos misión ad-gente e inter-gente.
Miriam Herrador
LMC Guatemala