Laicos Misioneros Combonianos

Semana de formación en Granada, España

LMCEsta pasada semana estuve acompañando a la comunidad Lisanga en Granada. Esta vez la formación fue en español, lo que paradójicamente fue un rollo pues la mayoría del material lo tenía en inglés o portugués, pero me vino bien para ir teniendo el material en diferentes lenguas.

Éste siempre es un momento privilegiado para mí. Salir del despacho, de los correos electrónicos y las videoconferencias para tener la oportunidad de compartir en primera persona con nuestros LMC. En este caso con David y Aitana (LMC de España) y especialmente con Paula y Neuza (LMC de Portugal que se están preparando en España para partir a Perú). David y Aitana son profesores y estábamos en la semana final de clases así que andaban muy atareados con exámenes, evaluaciones y actividades propias de este tiempo. De todas maneras hicieron hueco para compartir algunos momentos importantes de la formación y la semana. Ellos se ofrecieron voluntarios para acoger y hacer comunidad con Paula y Neuza en los meses que están aquí estudiando español y preparándose para salir al Perú.

Con Paula y Neuza compartí la mayor parte del tiempo. Por la mañana nos levantábamos temprano para rezar laudes y comenzar el día. Los primeros días tenían clases de español por la mañana, los otros días aprovechamos el primer momento de la mañana para hacer algo de deporte. Hay que estar en forma, la misión requiere también de ello. Sobre todo estar preparados para caminar mucho con la gente.

Después tuvimos bastante tiempo para conversar sobre la misión, la comunidad, compartir nuestro carisma comboniano, hablar sobre la Iglesia y los diferentes estilos de misión, conocer en profundidad nuestro LMC a nivel internacional y muchas otras cosas.

Siempre es ilusionante compartir estos momentos previos a la salida. Las inquietudes, los desafíos a afrontar y por encima de todo la confianza en Aquel que nos llama por nuestro nombre para servir lejos de casa.

Durante este tiempo en España muchos son los que han compartido con ellas su experiencia de misión, las han visitado o ellas han podido visitar a muchos LMC españoles y religiosos que han servido en misión (en Perú y otros países). De esta manera la misión se hace comunidad. No son ellas las que van a título personal sino que como misioneras son enviadas por nuestra comunidad LMC, que se hace presente en todo momento, se compromete en su formación y las acompaña también con su oración. Con ellas también nosotros vamos a Perú (comentaban algunos).

La semana terminó con el encuentro de evaluación de los LMC de la zona Sur de España. Creo que ellas se han sentido muy acogidas por todos ellos y por la familia comboniana en Granada (religiosos y religiosas) con las que han compartido muchos momentos de estos meses. Y para la zona Sur ha sido un bonito revulsivo, siempre que la misión toca a nuestra puerta nos moviliza, nos anima, nos pone en movimiento y da vida. Así ha sido aquí en España también con la preparación de nuestras compañeras de Portugal. Gracias.

Rezamos para que les vaya muy bien en su misión y estaremos siempre para acompañarlas en este camino de servicio a nuestros hermanos y hermanas en Perú.

LMC en Granada

Un saludo

Alberto de la Portilla

Con María, peregrinas del Amor

LMC comunidadAl igual que el que se pone en camino y sale de la comodidad de su casa, también nosotros, mochila a la espalda y con el corazón repleto de certezas y dudas, nos pusimos en camino… Peregrinas, en una carretera que no tiene inicio ni fin, por caminos ya recorridos y otros que jamás serán recorridos. Avanzamos por terrenos descubiertos, por suelos llenos de historia, por calles cubiertas de amor, avanzamos con Él, y plenas de María.

En el alma la certeza de que somos eternos peregrinos, de que somos a ejemplo de Jesús, simples refugiados en busca de Dios, en busca de plenitud y libertad…

Partimos y nacemos como comunidad en el mes de María, en el mes del centenario de las apariciones de Fátima. Nos sentimos enviados por María. Nos inspiramos en ella, misionera del sí. Buscamos seguir sus pasos. Ser misionero es sentirnos como María, embarazadas de Jesús, es ser sagrarios vivos de Jesús, es llevar a Jesús.

Estamos lejos pero nos sentimos peregrinos del Amor y nos sentimos en camino con todos los que se reúnen en Fátima festejando la gracia y la misericordia de las apariciones de Nuestra Señora junto al Papa. Sentimos que hoy, y tantos otros días, María aparece en nuestro corazón revistiéndonos de Gracia, Amor y Misericordia. Todos estamos llamados a seguirla. Todos estamos llamados a ser misioneros, como ella.

No tengas miedo. Pues hallaste gracia delante de Dios – dijo el ángel a María. Dios creándonos a su imagen nos mira constantemente con una ternura inmensurable, encuentra en cada uno de nosotros un refugio donde habitar. Nos llama. Nos envía continuamente ángeles para decirnos que no tengamos miedo, que Dios ha hallado gracia en nosotros y nos llama a ser misioneros del amor. Y nosotros le respondemos tantas veces con un ¿Yo? Pero… ¿yo, Señor? Nosotros, mirando a un lado y a otro lado, pensando que se equivocó. Nosotros, que tantas veces quedamos atrapados por las heridas que tenemos dentro, en nuestras angustias y en los caminos ya recorridos, prisioneros de las heridas e imperfecciones que tenemos. Nosotros que tantas veces dudamos de la llamada de Dios. Impidiendo recibir la llamada. ¡Confiemos! Seamos como María, respondamos SÍ, llevémoslo dentro de nosotros, donde quiera que vayamos.

La misión nos necesita. La misión nos convoca. La misión es difícil, pero si vamos juntos, cogidos de la mano, nos unimos a Dios, convirtiéndonos en instrumento de Dios, permitiendo que Él nos ame y trabaje en nosotros.

Digamos como María: “Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador“.

Familia Comboniana
Comunidad “Lisanga”
Aitana, David, Neuza y Paula

Nueva comunidad de formación en Granada-España (entre LMC de Portugal y España)

Pascua LMC España 2017

“Renuévanos Señor, que el mundo nos necesita”

Bajo este lema, la semana pasada los LMC de España nos reunimos en Comunidad para celebrar la Pascua. Fueron unos días de encuentro y de profundidad en los que tuvimos  la oportunidad de reflexionar y celebrar juntos el gran Misterio de Amor de Dios para la Humanidad y  para renovar en familia nuestro compromiso misionero.

Que nuestra fe en el resucitado nos haga sembradores de vida cada día.

LMC España

Encuentro europeo de Laicos Misioneros Combonianos

ViseuLa Asamblea Europea de los Laicos Misioneros Combonianos (LMC) se está realizando del 21 al 27 de agosto en Viseu, la casa madre de los Combonianos en Portugal. Participan en la reunión 74 adultos y 22 niños procedentes de Alemania, Austria, España, Italia, Polonia y Portugal. Los Combonianos que trabajan con el LMC en sus respectivos países también están presentes. Dos representantes fueron invitados a participar de las Combonianas y Seculares. Es una semana con un programa detallado de oración, reflexión, intercambio de experiencias y convivencia.

El LMC organiza sus asambleas europeas cada tres años. El último encuentro europeo tuvo lugar en 2013 en Cracovia, Polonia. En esa reunión se destacó algunos temas que fueron considerados de prioridad para profundizar en los grupos e individualmente, a nivel de los LMC en todos los países de Europa. Los asuntos estaban relacionados con la vida del LMC.

Los temas de esta semana son: identidad y vocación, formación, organización y coordinación, la economía y la sostenibilidad, la comunión y la familia comboniana.

El objetivo de todo este trabajo es compartir el camino de cada grupo en cada uno de los temas.

Este intercambio entre las personas de diferentes países ayudará a los miembros del LMC a integrar mejor su vocación misionera.

Los objetivos específicos de la asamblea son:

• Celebrar la vocación LMC, a partir de las características que son comunes a todos los grupos;
• Compartir experiencias hechas por los miembros de los diferentes países con el fin de conocer el estilo de vida de unos y otros;
• Reflexionar sobre el camino ya realizado tanto en Europa como a nivel intercontinental, en el que se evaluará lo que falta para alcanzar la meta;
• Dibujar algunas líneas inspiradoras para ayudar al LMC a caminar mejor a todos los niveles;
• Fortalecer los lazos como Movimiento Europeo LMC y su sentido de pertenencia a la familia comboniana.
“La reunión no sería posible – dijo Paula Ascensão – sin el esfuerzo, la disponibilidad y la dedicación de la comunidad de Viseu. Los Combonianos abrieron sus puertas y mostraron la disponibilidad para acoger la formación de los LMC y las reuniones en sus casas. Cuando preguntamos sobre la posibilidad de organizar la asamblea LMC Europea en Viseu, dieron una respuesta positiva y nos están ayudando a la organización de la misma. Es gracias a ellos que el LMC portugués es capaz de dar la bienvenida a casi 100 LMC de Europa aquí en nuestro país. Estamos muy agradecidos. Y pedimos las oraciones de parte de todos los que nos están siguiendo de lejos, para que esta asamblea europea puede tener éxito y producir mucho fruto”.

Viseu