Esto es ser misionera, ser capaz de aceptar los cambios con alegría e ilusión allá donde éstos nos lleven y con los hermanos que sea. Y es mucho más fácil cuando descubro con entusiasmo, que también en Cracovia me siento en familia y en casa. La comunidad me ha recibido con mucho cariño y el conocer a mis nuevas compañeras de aventura sólo ha hecho aumentar mis ganas de llegar a África. Comunidad internacional, tres polacas y una española hablando en inglés y con la intención y el deseo de aprender pronto el Acholi.
Somos Monika, Ewa, Asia y yo Carmen, y a pesar del frío del invierno polaco hay mucho calor en nuestros corazones y toda la voluntad de recorrer este camino juntas como comunidad. No sé si son las ganas que todas tenemos pero hemos conectado de maravilla y se respira muy buen ambiente.
Seguimos con el proceso de formación intentando asimilar e interiorizar cosas tan necesarias como saber quiénes somos (laicas combonianas) nuestra historia y lo que significa integrarse y entrar en una cultura desconocida, diferente y a la que queremos acercarnos con el mayor respeto posible.
Creo que somos un equipo que se va a complementar bastante bien, donde hay mucha frescura y esa alegría por vivir el Evangelio y la Misión, que el Papa Francisco nos está recordando y que nosotras trataremos de no olvidar en ningún momento de nuestra experiencia en Gulu (Uganda).
No podía haber sido más positivo este comienzo de año con mi familia, la familia comboniana, con las laicas polacas y los Padres combonianos de la comunidad de Cracovia. Juntos consiguen transmitir esa idea que todos soñamos de unidad y de entusiasmo por un mismo objetivo: seguir a Jesús al lado de los últimos.
Carmen Aranda Arnao. LMC
Hola Carmen,
me alegro mucho de leer tus noticias sobre la vuestra communidad LMC en Cracovia y ver la foto.
Me parece muy importante de aprender juntas que significa ser misionera hoy.
Como misioneros queremos evangelizar o sea humanizar segundo los criterios de Reino de Dios.
Asi estamos aprendiendo aqui a Roma.
Os deseo muchas ganas de estudiar, trabajar, orar, discutir e vivir juntas.
Unidos en el carisma misionero y la oracion,
os saludo todas
Günther
Hola Günther!!! qué sorpresa! muchas gracias por tu comentario y por tus ánimos. Estamos muy contentas y con muchas ganas de empezar esta aventura a la que nos llama el Señor. Ojalá sepamos ser humildes y alegres para seguir aprendiendo cada día y para vivir y transmitir nuestro entusiasmo.
¡saludos!
Carmen
Hola hermanas LMC, es un gusto saber que en todo el mundo haya prendido el entusiasmo por la misión y ustedes son el testimonio vivo que Cristo está vivo, más aún ahora que se harán uno con el pueblo a donde están destinadas, mucha oración y ánimo les deseo desde Perú, yo también soy LMC.