Laicos Misioneros Combonianos

!Experiencia de desapego!

LMC Guatemala

LMC GuatemalaSomos la familia Camey Figueroa y es una alegría compartir nuestros primeros pasos hacia la Misión Brasil.

Estamos en Santo Tomás, San Salvador desde el día 07 de septiembre y partiremos de regreso a Guatemala el 22 del mismo, en donde estamos viviendo nuestra Experiencia de Desapego y vida comunitaria, previo a nuestra partida formal de misión.  Ha sido una experiencia muy necesaria y enriquecedora.

Ciertamente podemos imaginarnos muchas cosas respecto al campo misión, podemos incluso llegar a pensar que esta experiencia no es necesaria pues basta ser muy precavidos pensando qué vamos a hacer, qué vamos a llevar, cómo trabajar, entre otros. Sin embargo no es hasta que se vive en carne propia que se ven y se viven realmente las cosas como son y eso ha hecho de esta experiencia una gran fortaleza para nosotros como para la comunidad LMC de la Provincia de Centroamérica, pues todo el trabajo que hemos hecho acá ha sido con el apoyo del nuevo grupo LMC que está naciendo en El Salvador.

Quizás la realidad más particular que hemos vivido es el mismo hecho de ser familia. Por misericordia de Dios, como familia tenemos muchas fortalezas pues nos conocemos, sabemos cómo complementarnos y seguir adelante. Pero también es cierto que la situación en la que estamos viviendo es fuera de lo común, nunca lo hemos vivido de esta forma y eso nos ha traído ciertas dificultades.

Éstas dificultades nos han hecho también darnos cuenta que es necesario estar aún más unidos, más conscientes de nuestras debilidades y la necesidad que tenemos de ser más pacientes y perseverantes respecto de ellas.

LMC Guatemala Ya propiamente en el trabajo misionero, y qué vale la pena decir que no se desliga en lo absoluto de nuestro ser individual y familiar, ha sido muy visual respecto a las realidades que viven las personas hoy en día.

Hemos visitado en su mayoría personas de la tercera edad, algunos pocos sanos, otros muy ancianos y enfermos pero en su mayoría todos aquejados por la soledad.

Ancianitos que han tenido familias numerosas, como es el caso de niña Hilda, que tuvo 6 hijos, 2 murieron a temprana edad y los otros 4 vivieron con ella. Claro, su esposo la dejó con los 4 hijos. Ella tenía que trabajar mucho y dejar a los niños solos largas horas. Ahora, los hijos posiblemente sin malas intenciones pero también heridos sin sanar, reflejan la misma situación.

Ella ahora vive con un hijo, que tuvo solo un hijo y que cuya esposa lo dejó. Ahora ese nieto, hijo único de su hijo también se va, en esta ocasión con una hermosa noticia, lleva varios años en el seminario y saluda constantemente a su abuela.

A pesar de que es un país vecino, al llegar nos encontramos con una situación de pobreza y violencia que es aún mayor que en Guatemala, la desigualdad social se ha vuelto más grande desde que cambiaron la moneda al dólar sin una consulta popular y la corrupción daña fuertemente todas las áreas de desarrollo. Sufren de mucho abuso de poder y la Iglesia trata de apoyar a las comunidades para que luchen contra ese mal.

Algo que nos llena de mucha alegría es ver como Monseñor Romero logró impactar en la vida de tantos Salvadoreños, quienes están esperando con ansias su canonización en octubre, no hay casa ni iglesia que no tenga la imagen de él, realmente es un símbolo de justicia y un signo del amor de Dios, ya que lucho por la mediación entre militares y guerrilleros.

Estas realidades no están fuera de lo normal, pues nuestras sociedades actualmente también sufren estas situaciones. Algunas veces por el afán del “vivir bien” y otras también a causa de la pobreza de nuestros países latinoamericanos.

LMC GuatemalaHoy por hoy, es más necesario que como familias vivamos nuestro ser familia. Creer en las promesas de nuestro buen Padre Dios, en donde no debemos preocuparnos por tantas cosas, si las flores del campo se visten hermosas y los pájaros del cielo no trabajan y comen. Así pues Él que es Buen Padre Dios Todopoderoso siempre se recuerda de nosotros.

Nuestra primera preocupación o mejor dicho, nuestra ocupación primera a de ser Amar a Dios y dejarse amar por Él. La vida de Él nos vino y a Él regresará (si así lo decidimos diariamente) y entonces no tener miedo de ser Padres o Madres, tampoco de ser hijos ni mucho menos de ser familia.

Damos gracias a Dios por darnos esta oportunidad de poder reconocerlo en la sencillez y en la cotidianidad, pero sobre todo porque nos permite ser testigos de la abundante generosidad de las personas quienes nos reciben en sus casas y nos dan todo, también nos permite darnos cuenta que esta es misión de Dios y no nuestra, que solo somos una familia dispuesta a amar y que busca hacer su voluntad, “Lo que es bueno, perfecto y agradable a Dios Rom 12,4”

Gracias a Dios también el tiempo abundó para otras actividades, como lo fue la visita de animación misionera a la Parroquia de Santo Tomás, el día sábado por la noche, en donde se reúne una comunidad Neocatecumal, que por cierto, también son misioneros ad gentes!

LMC GuatemalaAhí Participamos en la Eucaristía y el P. Santiago Piccinelli, MCCJ presidió la misma, nos presentó como comunidad de LMC junto a nuestro asesor MCCJ el Hno. Humberto. Nos permitió hacer la animación misionera así como vender nuestros productos misioneros hechos con materiales reciclados, y por nosotros mismos.

Como parte del trabajo misionero también está el Desarrollo Humano, en donde San Daniel Comboni insiste: ¡¡Santos y Capaces!! Así  pues,  en  una  tarde  logramos  hacer  un  taller  para  que  las mujeres de las colonias La Hermita y La Morán participaran para aprender  también  ellas  a  hacer  manualidades  con  materiales reciclados. Fue, como siempre, una experiencia maravillosa, pues también se acercaron niños. También  Niña  Betty,  a  quien  le amputaron  su  pie  derecho  hace  2  años  y  está  empezando  a aprender a usar prótesis, por ahora anda en silla de ruedas, pero quien no se rinde y se presentó.

Ana Cris y Alejandro, LMC Guatemala

Sobre las Jornadas Misioneras 2018 – “Yo soy misión”

LMC Portugal

LMC PortugalEl fin de semana del 15 al 16 de septiembre se celebraron en Fátima, las tan esperadas Jornadas Misioneras 2018 con el tema: “Yo Soy Misión”. Estas Jornadas contaron sobre todo con la presencia de varios institutos, congregaciones, movimientos y especialmente jóvenes misioneros venidos de varias partes del país y del mundo.

Estas Jornadas comenzaron con la acogida y con la oración preparada por la organización, luego tuvimos la apertura con la presencia del Señor Obispo D. Manuel Linda, Obispo de Porto que nos dio, como siempre, unas breves palabras sobre lo que es la misión y lo que es ser misión en el mundo de hoy, particularmente en el mundo de la juventud de este siglo.

Poco después contamos con un orador de gran prestigio en estos días, el Dr. Juan Ambrosio, profesor de teología de la Universidad Católica de Lisboa, que nos explicó de una manera breve y sencilla que significa “Yo soy Misión.” Según el Dr. Juan Ambrosio ‘Yo soy Misión’ no es un encuentro de experiencias vivida de fuera para dentro, es decir, yo, yo y más nada. En este caso ‘Yo soy Misión va desde dentro hacia fuera, esto es hacia “el otro”, porque sí soy Misión, porque soy bautizado, soy hijo de Dios y fuimos elegidos por Él para servir y amar a los demás.
De ahí que el cristianismo tenga siempre como fundamento, meta y estructura una experiencia de encuentro principalmente con Jesucristo (en su modo de ser y de vivir); con Dios (en la propuesta del Reino) y con el ser Humano y su historia (en lo que son sus anhelos, sus fragilidades y sus realizaciones). Por eso y según el Dr. Juan, la Misión tiene que ser una experiencia de encuentro vivido con Jesucristo en primera persona del singular (yo) y en primera persona del plural (nosotros) y sólo así podremos ser y hacer misión en el mundo.

LMC PortugalPero en buen rigor y según esta noción, el Sr. Ambrosio nos dice también que no es la Iglesia la que tiene una Misión, sino que es la Misión que tiene una Iglesia, es decir, la Misión tiene que ver con todos y con cada uno porque la Misión no está reservada sólo a “especialistas”, sino a todos los bautizados en el nombre de Cristo. Y como tal, se puede caracterizar la Misión en tres grandes principios, o mejor dicho, el gran trípode donde se asienta toda la identidad cristiana que son: Carisma (anuncio de la Palabra); Liturgia (Celebración de la fe, Eucaristía) y Diaconía (vivencia de la caridad), para ello la Koinonía es la fibra que conecta estas “tres varas” que conforman este Trípode. Por eso la Misión de la Iglesia tiene que ir hacia todas las periferias teniendo siempre como objetivo el anuncio, la celebración y la caridad en la plenitud de su esencia para ser considerada Misión cristiana.

Después de una mañana más teórica, basada fundamentalmente sobre el lema de las Jornadas “Yo Soy Misión”, proseguimos por la tarde con una exposición más práctica y vivencial a través de los Talleres que tenían como temas: 1. Iglesia y diálogo; 2. Misión y comunión; 3. Misión en las periferias; 4. Todos, todo y siempre en misión; 5. Ser Misión y 6. Compartir el viaje.

LMC PortugalDurante la noche, tuvimos la presencia de la Banda Missio para alegrar/animar a la juventud con sus canciones que nos emocionan y nos tocan en el corazón. También en este primer día de las Jornadas tuvimos algunos testimonios misioneros. Para concluir el día hicimos la oración de la noche y cada uno fue para su nido a descansar para el día siguiente.

El domingo, día 16 y último día de las Jornadas, tuvimos una mesa redonda con varios intervinientes que tenía como tema “¿Qué Iglesia pretendemos? Para una misión más comprometida.
Y para concluir las Jornadas Misioneras, celebramos la Eucaristía presidida por el Obispo del Algarve, Monseñor D. Manuel Quintas. Después de la Eucaristía tuvimos el envío de algunos misioneros que parten en misión Ad gentes este año y las conclusiones de estas Jornadas Misioneras “Yo Soy Misión”. Después fueron las despedidas de los participantes y la partida de cada uno a su modo en misión para sus vidas cotidianas.

David Fernandes Ganilo y Laura Fernandes Ganilo

Noticias de Guatemala desde El Salvador

LMC Guatemala

LMC GuatemalaEl fin de semana del 14, 15 y 16 de septiembre, tres miembros de la comunidad LMC en Guatemala, Mireya Soto, Miriam Herrador y Lily Portillo, junto a  nuestro asesor Hno. Humberto Rua, viajamos a El Salvador que queda aproximadamente a cinco horas de viaje, por carro.

¿El motivo?   …….. Fueron dos, ¡y muy importantes!

Uno, que Alejandro y Ana Cris Camey Figueroa, con sus cuatro hijos, están allá viviendo un tiempo de vida comunitaria, como preparación a su próximo viaje de misión a Brasil.  La comunidad LMC, salvadoreña,  así como la comunidad MCCJ,  los han acogido y acompañado para participar en actividades de catequesis, visiteo, y les han brindado apoyo en todo sentido.  Además han tenido oportunidad de hacer animación misionera en parroquias y a través de un programa de radio.    A Esteban, Isabel, Agustín y Lucia, sus cuatro niños, los vimos muy animados y atienden su misión con amor y alegría.  Toda nuestra gratitud para nuestros hermanos de El Salvador.

“TODO SUCEDE POR LA DISPOSICION ADMIRABLE DE DIOS, AMEMOSLO PUES DE TODO CORAZON Y QUE TODA NUESTRA CONFIANZA ESTE EN ÉL”          

San Daniel Comboni

LMC GuatemalaEl otro motivo, visitar a las coordinadoras de la comunidad LMC-PCA EL SALVADOR, a manera de acompañamiento.  Ellos están en su primer año de formación, se han organizado muy bien y como en todo inicio,  viven gozos y dificultades, dudas y temores.  Son persona de gran entrega, fe y amor.  Van hacia adelante, nuestras oraciones y las oraciones de todos para ellos, por favor.

“ME SIENTO TOTALMENTE LLENO DE FUERZA, VALOR Y CONFIANZA EN DIOS Y EN LA SANTISIMA VIRGEN MARIA, QUE ESTOY SEGURO DE SUPERAR TODO Y DE PREPARARME A OTRAS CRUCES MAS GRANDES QUE PUEDAN VENIR”   

San Daniel Comboni

Nos encomendamos a los Corazones de Jesús y María, San Daniel Comboni, ruega por nosotros.

Un abrazo fraterno desde Guatemala

Noticias de Piquiá (Brasil)

LMC Brasil

LMC BrasilBuenos días amigos, esperamos que se encuentren todos bien.

Nosotros estamos bien y muy contentos pues ayer fue un día muy especial. Piquiá de Baixo hizo otra conquista, finalmente firmó el contrato de la segunda fase del proyecto de reasentamiento que posibilita el inicio de la obra de construcción del nuevo barrio. La alegría de este momento nos contagió a todos y entre sonrisas, abrazos y lágrimas la esperanza fue reavivada.

El día 17 de septiembre quedará marcado en muchos corazones como un día donde un sueño se acerca más a convertirse en realidad, el camino sigue siendo grande, pero el pueblo seguirá luchando por sus derechos.

Una fecha muy simbólica para nosotros, por haber coincidido con el día en que recordamos a don Franco Masserdotti, misionero comboniano que trabajó en Balsas, ciudad del sur del Estado de Maranhão. Su testimonio de vida estuvo marcado por la defensa de los derechos humanos y de los pueblos indígenas y por la defensa de la familia y de la justicia social. Él insistió que además de dar un pescado y de enseñar a pescar, es necesario “limpiar el río” contaminado por la injusticia social.

Agradecemos vuestras oraciones y sigamos juntos,

Liliana y Flávio, LMC Brasil

Os dejamos un video que ayuda a contextualizar la realidad de este pueblo

Regreso de Maria Augusta a Bangui

LMC Portugal

LMC PortugalRecién llegada a Bangui (a principios de septiembre), después de haber estado de vacaciones en Portugal, la LMC María Augusta siempre nos escribe unas líneas sobre lo que va viviendo.

¡Buenos días a todos! Gracias a Dios llegué bien. Encontré al padre Fratelli, comboniano italiano, en Casablanca, ya en el avión.
Con las maletas no nos fue del todo bien… una de ellas no llegó, pero no fue sólo la mía. Una del padre tampoco llegó y eso les sucedió a muchas otras personas. Fuimos a reclamar y, en principio, las tendremos el sábado por la mañana.
Cuando llegué aquí supe que el padre Zé Carlos había muerto. ¡Estoy contenta de haberlo visitado! Él estaba sufriendo mucho porque tenía dos cánceres… ¡Que el Señor acoja su alma en Paz!
Agradezco a todas las personas con las que contacte en las parroquias, así como la buena acogida que me hicieron. Que el Señor os recompense por todo lo que hacéis por los misioneros (las oraciones y el compartir de lo que tenéis) y os conceda siempre su gracia. ¡Gracias a todos por vuestra generosidad!
Unidos por la oración.
Un gran abrazo para todos.

Maria Augusta, LMC

PS: Acabo de llegar del aeropuerto, gracias a Dios corrió todo bien. Nos dejaron salir sin abrir las maletas. Vinieron plastificadas para estar bien protegidas.
Estaba todo como lo dejamos, por lo que agradezco al Señor. ¡Todo lo que llevaba nos hace mucha falta!
Todavía me quedaré en Bangui hasta el lunes.

Un gran abrazo y besitos para todos
Maria Augusta