Laicos Misioneros Combonianos

Animación Misionera – San Mamede Infesta

Animacion Misionera PortugalEl pasado fin de semana, 11 de junio, tuvimos una actividad de animación misionera en la Iglesia Parroquial de S. Mamede Infesta, municipio de Matosinhos. El día se presentó bien soleado y sobre las 10h comenzamos el programa. Confieso que me sentía un poco preocupada porque el 70% de los parroquianos era de edad avanzada. ¿Las palabras de Carlos y de Sandra harían eco en estos corazones? Pero el Señor toca a todos y en realidad, entre las dos celebraciones en que estuvimos presentes y el rosario misionero que pudimos rezar, el resultado fue muy positivo.

La misa de las 19h fue celebrada por el Padre Dario, que imprimió un estilo diferente a las habituales celebraciones.
Identificarme ante mi comunidad parroquial, como parte de la Familia Comboniana me hizo estar feliz. Es la sensación de encontrarme en el camino correcto, en el camino que el Señor me indicó.
Gracias Familia Comboniana por haberme recibido en vuestro seno con tanto cariño y amor fraternal.

Animacion Misionera Portugal
Maria José Martins

“Lleva la barca hacia aguas más profundas, ve a navegar” – Envío de los LMC Liliana Ferreira y Flávio Schmidt

LMC envio misionero“Lleva la barca hacia aguas más profundas, y echen allí las redes para pescar” (Lc 5, 4)
El pasado domingo 4 de junio celebramos con alegría el envío de nuestros Laicos Misioneros Combonianos Liliana Ferreira y Flávio Schmidt en la parroquia de Lamas, Miranda do Corvo donde pertenece la propia Liliana.
Unidos en la fe y en el amor de Cristo parten para la Misión de Piquiá, Maranhão, en Brasil, aceptando la invitación del Señor a partir, a darse, y ser mil vidas para la misión.

Y con ellos vamos. Con ellos partimos en oración, en pensamiento y con el querer (y creer) que Dios los iluminará en su vocación de y para el amor y en su camino de entrega y compartir la vida con el hermano.
Agradecemos estas dos vidas que tanta vida generan a su alrededor y por la vida que han de multiplicar en las tierras por Dios indicadas.
Juntos en misión.

Carolina Fiúza

Día de la Familia Comboniana en Portugal

Familia Comboniana Portugal El pasado día 10 de junio, día del Ángel de Portugal, nos reunimos con varios miembros de las diversas ramas de la Familia Comboniana – Misioneras Seculares Combonianas, Hermanas Misioneras Combonianas y Misioneros Combonianos – para, con mucha alegría, celebrar por primera vez el DÍA DE LA FAMILIA COMBONIANA. El evento tuvo lugar en Óis de Ribeira (Fermentelos – Águeda) y éramos unos 50 misioneros y misioneras.
Después de los abrazos de quien se reencuentra en espíritu de familia, el programa comenzó con la Eucaristía que se desarrolló en una de las salas de la casa de los Combonianos de Fermentelos. ¡Confieso que es un lugar que a mí me recuerda un verdadero cenáculo de Jesús por la sencillez que prima en todo el espacio!
Seguimos con el almuerzo compartido y una convivencia en la Pateira de Óis de Ribeira, donde pudimos disfrutar del agradable día soleado, entre conversaciones, compartir la vida, las canciones y mucha naturaleza. Fue curioso la semejanzas de toda la belleza de Pateira, en la que existe un gran lago, con el Lago de Garda junto al cual San Daniel Comboni creció.

Un día de convivencia para celebrar la fertilidad del carisma comboniano en los 150 años de la fundación de los Misioneros Combonianos. Y “como son bellos los pies que anuncian la paz”, poder estar más cerca de cada persona que constituye esta gran Familia y enamorarse aún más de ella, por la grandiosidad del corazón de cada uno que allí estuvo aquel día.

Familia Comboniana Portugal

Con Amor, Carolina Fiúza

Releer y releerme – la familia y el proyecto de vida

LMC Portugal

LMC Portugal En los pasados ​​días 19, 20 y 21 de mayo se desarrolló la 9ª unidad Formativa LMC en Viseu, con el tema “Releer y releerme – la familia y el proyecto de vida”, orientado por el psicólogo Dr. Miguel Villas Freitas.

La formación comenzó al final del viernes tarde, día 19. Después de una calurosa acogida, nos fuimos juntando, con intercambio de sonrisas, besos, abrazos y novedades. ¡Sí, son abrazos al estilo LMC, como yo les llamo, por ser bien apretados y genuinos de quien anhela encontrarse para compartir momentos únicos y muy enriquecedores!

Comenzamos el sábado con una breve introducción del formador, para que entendiésemos mejor lo que es releer: hacer una lectura detallada de los acontecimientos pasados ​​y de mis características; Tomar conciencia de que nadie lo hace por mí; ¡Es un hacerme presente ante la “Presencia” para un encuentro conmigo mismo! Y como “cada uno de nosotros se define por las relaciones que mantiene con el otro”, este encuentro se hizo en grupo y así encontramos juntos los signos de esta “Presencia” en nuestras vidas.

A continuación, con la orientación del formador, cada miembro del grupo fue incentivado a hacer un viaje a su pasado, buscando un período de su vida donde fuera muy feliz. Después de un breve análisis sobre los motivos motivadores de esta felicidad, se nos pidió trasladar ese estado de espíritu de paz, éxito, bienestar, alegría, realización y felicidad, para el momento presente. Cada uno fue al encuentro de su perla de sabiduría que desencadenó tanta felicidad en ese período que cada uno revivió. Es necesario recuperar esta perla, traerla para el hoy, cuidar de ella…

Analizamos experiencias bíblicas de un releer interior como por ejemplo el encuentro de Jesús con los discípulos de Emaús y el encuentro de Jesús con Nicodemo. Son experiencias donde se pasa inevitablemente por las siguientes etapas: (1) Reformar; (2) Conformar; (3) Transformar; (4) Confirmar.

Quien pasa por ellas analiza las zonas de su ser que necesitan ser convertidas, busca tomar la forma de Jesús, se transforma y pasa a vivir en conformidad con esta transformación. Así, sale de sí, abandona las falsas seguridades y va hacia una lógica de entrega y servicio. ¡Pasa a buscar no sólo lo que da bienestar, que satisface, sino sobre todo lo que realiza y deja marcas más profundas en su carácter!

A lo largo de la mañana se nos proporcionaron momentos de reflexión individual, seguidos de la posibilidad de compartirlos de dos en dos y luego con todo el grupo.

Concluimos la mañana de reflexión viendo el documental “Celebrando lo que el mundo tiene de bueno” de National Geographic, riquísimo en mensajes relacionados con la búsqueda de lo más bello en este mundo.

Durante la tarde reflexionamos sobre las 24 fuerzas de carácter, eligiendo cada uno, aquellas que lo impulsan a la acción con toda naturalidad. Nos preguntamos, individualmente, sobre qué energías necesitan ser más trabajadas en nosotros mismos y cuáles son las más indispensables en la Misión como LMC.

Luego hicimos la reflexión individual, con preguntas muy específicas para responder y compartir sobre dos puntos: (1) Mi pasión; (2) Mi propósito.

En la oración de la tarde tuvimos momentos de gran interioridad y compartir. Él, Jesucristo, está allí con nosotros y su Espíritu habla en cada uno. ¡Qué bueno es estar allí reunidos en el cenáculo!

Por la noche, y para relajarnos, sin perder el espíritu de interiorización, vimos la película: “El Mordomo”.
El domingo surgieron más momentos de oración y compartir.

Se nos presentaron 3 cuadros alrededor de los cuales, deberíamos poner nuestra atención y reflexión:
1) “Jesús muestra sus heridas a Tomás”

– ¿Cuáles son mis heridas? ¿Cómo asumirlas en lugar de ocultarlas?

2) “Huellas en la arena”

– Releer momentos de mi vida en que Jesús me cogió en brazos. ¿Con quién y por quién?

3) “Reducir el tamaño de mi cruz no es solución.”

– ¿Soy consciente de que siempre que intento disminuir mi cruz pierdo la oportunidad de crecer a nivel humano y espiritual?

Buscamos un propósito individualmente para llevar a casa como desafío y punto de esfuerzo, teniendo en cuenta que sólo comprometiéndonos con el cambio podremos ser felices.

En conclusión: Sólo encontrándome conmigo, viendo cómo soy realmente, cuáles son mis heridas, qué cruz llevo y poniendo todo en las manos de Dios, dejándome transformar, aprenderé a sacar lo mejor de mí mismo para el mundo, recorreré el camino que me llevará a la misión siendo feliz en esta misión a la que estoy destinada.

LMC Portugal

Gloria Rocha

Noticias de la Misión en la República Centroafricana

LMC RCAEspero que estén satisfechos con la visita pastoral del señor Obispo y que ésta dé frutos.

Aquí, el padre Jesús está enfermo. Pero, gracias a Dios, ya está mejor… Todos los demás miembros de la comunidad apostólica estamos en forma y, por eso, damos gracias al Señor, por su gran amor hacia nosotros. El padre Samuel partirá a Etiopía para hacer exámenes médicos y descansar. Ruego al Señor, para que al volver venga muy bien, lleno de salud y energía, para afrontar de nuevo los desafíos de la Misión. Hoy mismo se volvió de nuevo con malaria. Espero que mañana esté mejor, pues tiene el viaje a su país.

Esta vez vine a Bangui para abrir una cuenta a la escuela. Hay una organización que da una ayuda y exige que tengamos una cuenta donde ellos enviarán el dinero.

Traemos con nosotros una pareja de pigmeos con un bebé que nació con una deformación en la nariz para ser operado en el hospital pediátrico donde estuvo la pequeña Merveille. Ya ha sido operado y parece que todo fue bien, ¡Dios permita que sí! Saldrá el viernes, volverá con nosotros a Mongoumba para poder seguirlo bien hasta que no necesite hacerse la cura, porque en el campamento no hay condiciones de higiene ni nadie que sepa hacerlo. Espero que Honoré (así se llama) quede bien… ¡Los padres están muy contentos!

Al lado del Honoré está un bebé que nació sin ano, las heces le salen por la barriga. Será operado mañana… El Señor permita que quede bien, para que más tarde pueda tener una vida normal.

Merveille, gracias a Dios, está creciendo ahora normalmente.

María ya se recuperó un poco de la malaria que tuvo; Sigan rezando por ella.

Yo pido al Señor todos los días, por todos vosotros, que él os llene de su gracia. Rezo a María para que el viaje del Papa a Portugal corra muy bien y que mucha gente se convierta a Jesús.

Siempre unidos por la oración.

Un gran abrazo Misionero para todo el mundo.

Maria Augusta LMC portuguesa en la República Centro Africana