El domingo de Ramos pasado hemos comenzado un momento muy importante en la Iglesia católica, la Semana Santa. Hoy es Sábado Santo, el día de la gran espera. Estamos muy emocionadas y muy contentas de poder pasar este hermoso momento entre el pueblo Acoli. Aquí la manera de celebrar cualquier fiesta es increíble. Comenzando por el Domingo de Ramos. La iglesia estaba llena de gente, cada uno de ellos (desde el más joven hasta el más viejo) mantenía una ramita de palma y la agitaba. Fue alucinante, porque te sentías como en la entrada de Jesús a Jerusalén. ¡Increíble!
El Domingo de Ramos el sacerdote nos preguntó a todos nosotros: ¿qué estás esperando? ¿Qué esperan de esta Semana Santa? ¿Qué está esperando el pueblo Acoli?
Las personas aquí saben lo importante que es la resurrección. Están esperando por Él, que ha resucitado de la muerte. Están esperándole a Él, que sufrió para sanar nuestros pecados y darnos una nueva vida. Están esperando a Jesús, que trae alegría y esperanza. Y os deseamos todas estas cosas. Queremos que conozcáis a Jesús, resucitado de la muerte, le pedimos que hagan una pequeña parada para pensar sobre este gran misterio, pensar sobre el gran amor de Dios que entregó a su Hijo para morir por nosotros y nuestros pecados.
Que Jesús te da fuerza en tus caminos misioneros, la fuerza para seguirlo todos los días, llene tu corazón de alegría, paz y esperanza.
¡¡¡Feliz Pascua !!!
LMC en Gulu
Gracias por todos los deseos. Sí es emocionante vivir la Semana Santa entre los que realmente esperan algo y no están satisfechos con lo que tienen. Solo los que sienten la necesidad de ser salvados tienen esa apertura al Dios que se acerca al hombre. Aquí en Perú también hemos vivido esa experiencia en medio de nuestros hermanos de Pamplona Alta, la periferia de Lima y ha sido un gusto contagiarse de esa fe necesitada de su resurrección.