Os dejamos aquí un email que nos llega desde Congo sobre la situación actual en el país.
Buenas noches Alberto,
No conseguí el documento que pedí y no pude devolverte la llamada porque aquí el fin de semana del 31 ha sido complicado para los católicos debido a la marcha de los laicos contra la situación política del país.
En nuestra parroquia, durante la misa de las 6 en punto en la que participé, los soldados entraron en la iglesia a las 7 a.m. justo en el momento de la homilía. Arrojaron gases lacrimógenos y se colocaron frente a las salidas de la iglesia y luego dispararon con munición real. Estuvimos atrapados en la iglesia durante 30 minutos. Entonces los sacerdotes se organizaron para ayudarnos a refugiarnos en la sacristía.
Luego, una hora después el sacerdote retomó la misa, terminamos alrededor de las 11 de la mañana y luego comenzamos nuestra marcha, a pesar de la situación.
En cada barrera que pasábamos, los policías nos intentaban intimidar con brutalidad para intentar que nos dispersásemos. Cuando se acercaban nos arrodillábamos o tirábamos al suelo y cantamos canciones a María. Ellos intentaban llevarse a parte de las personas y golpeaban al grupo. Después de 45 minutos de marcha, llegaron dos autobuses militares, comenzaron a disparar gas lacrimógeno y el aire se hizo insoportable. El shock fue terrible. El sacerdote permaneció de pie, sosteniendo el crucifijo en su mano. Ellos estaban fuertemente armados y no se inmutaron. Luego rezamos el Magnificat, cuando terminamos el sacerdote dio media vuelta y terminamos la marcha en la parroquia st Charle Lowanga a las 13h.
Hubo varios heridos y algunos muertos. Yo misma estoy herida en las piernas y, por tanto, en reposo médico desde el lunes.
Gracias por orar por nuestro país, tenemos esperanza en vosotros.