Maravillosa de Dios es el nombre de nuestra más pequeña protegida, nació con 1.400kg, huérfana, su madre murió después del parto. La abuela vino a pedir apoyo a la Misión durante una de mis visitas a Bangui. Como en Mongoumba no hay leche para bebés en el hospital se envió para la Unidad de Nutrición, donde, durante quince días se alimentó con leche adaptada para niños desnutridos; comenzó a ganar peso, pero la abuela estaba ansiosa por salir, una día fue al campamento y no volvió, dejando la pequeña al cuidado del personal de la unidad…
Tan pronto como regresé a Mongoumba la primera pregunta que me colocaron fue “¿Qué hacer con la bebé? ¡No puede ni debe continuar en el hospital! “Toda la familia se había ido a la selva y sin familia es imposible llevar a la bebe a las Hermanas de la Caridad de Mbaiki, pues no la aceptan. En la Comunidad comenzamos a pensar en la posibilidad de buscar alguien que pudiera cuidar de la huérfana y ese alguien estaba muy cerca. Una de los ayudantes de la unidad había comentado que no le importaba quedarse con la niña, el único problema serían los gastos extras ya que ella es viuda, con hijos pequeños y sin apoyo. Hablamos y se acordó que ella cuidaría del bebé y la Misión pagaría el costo de los alimentos y la ropa. ¡La Maravilla que también se llama Elisabete tiene madre adoptiva! ¡Ya tiene seis meses, está grande y hermosa! Estos son las pequeñas, grandes, maravillas de Dios que nos animan a continuar al servicio de la misión.
Con amistad
Élia Gomes LMC en Mongoumba