Laicos Misioneros Combonianos

Gran Kermes Misionera

KermeseEl pasado 12 de Octubre los LMC de México nos unimos a la gran fiesta de la Familia Comboniana celebrando a nuestro fundador y guía: San Daniel Comboni. Los sacerdotes, hermanos, las misioneras, laicos y un gran número de bienhechores y amigos vivimos una gran kermes misionera. Las actividades iniciaron desde muy temprano montando los puestos con mucho entusiasmo. Tanto en el desayuno como en la comida pudimos degustar de varios antojitos mexicanos, así como de algunos postres; incluso hubo comida internacional, representada con el puesto de sushi y kimbap. En el área de la diversión contamos con la tómbola (siempre es divertido saber qué vas a ganar), los inflables, el registro civil y la gran subasta que fueron todo un éxito.  Por cierto, nosotros estuvimos a cargo de la fruta picada.

En medio de tal ambiente misionero, no podía faltar el sacramento de la reconciliación, y para festejar con broche de oro, nuestra santa eucaristía, la cual fue amenizada con cantos combonianos y misioneros.  Lo más importante, debemos recordar que todo es por una gran causa: LAS MISIONES. Agradecemos a todos los que apoyaron esta noble labor ya sea vendiendo, consumiendo o simplemente con su presencia y oración, ya que su granito de arena sin duda fue necesario y fundamental para llevar a cabo nuestro magno evento. Que Dios nos siga bendiciendo a todos y con la guía y fuerza de San Daniel Comboni sigamos adelante.

José Luis Hernández (LMC, México).

Experiencia comunitaria de Madzia en Polonia

MagdaDesde principios de octubre empecé mi experiencia comunitaria en Cracovia. Esta es la última parte de la formación antes de ir a misiones (¡porque en enero voy a Etiopía!). Durante estos dos meses hay un montón de cosas que he experimentado: la vida en la comunidad (ya sea en teoría a través de las reuniones y de las lecturas de formación, así como en la práctica al compartir comunidad con los MCCJ), y donde también hay una gran cantidad de formación:

  • Idioma (Inglés por el momento, con el fin de mejorarlo, y luego en enero voy a empezar a aprender amárico, que parece ser toda una aventura muy interesante 🙂
  • La Biblia (reuniones con la hna. Joanna, que me ayuda a comprender las Escrituras, y para entender mejor lo que Dios me está hablando).
  • Comboni (aprender sobre Comboni, su ideal de vida y trabajo en la misión, así como diversos aspectos de los LMC).

También he podido participar en las reuniones de un grupo de misiones formado por estudiantes, ayudar en las animaciones en parroquias, realizar trabajo voluntario, explorar la historia y cultura de Etiopía, participar una tarde con el grupo LMC de Cracovia, lo que ayuda incluso a construir una comunidad laical acá.
Y, ¿cuál es la cosa más obvia y más importante? La oración. Participo en los Laudes y Vísperas de la Comunidad, en la Eucaristía diaria, la oración personal, la adoración. Y al final podré realizar un retiro ignaciano en Zakopane.
Tantas cosas suceden 🙂 Espero que sea, aunque muy corto, un tiempo fructífero que me ayudará a prepararme mejor para mi misión en Etiopía.

Madzia

El Trueque: Una lección de Intercambio

pastel de melocotón
Lo que yo di.

Hace poco fui a visitar dos de las señoras del grupo de pastelería de mujeres en el que participo, a quienes no había visto desde hace un par de semanas. Decidí llevarles mi porción del pastel que el grupo y yo habíamos hecho ese día, bizcocho de yogur con melocotones. Cuando llegué a la primera casa, fui recibida por Rocío. Ella aceptó el pastel y desapareció en una habitación en el extremo más al fondo de su casa. Regresó con una sonrisa y un enorme trozo de pastel de chocolate que acaba de terminar de preparar.

pastel de chocolate
Lo que me dieron.

Al salir de su casa, con la tarta de chocolate en la mano, me sacudí la cabeza, pensando: “Es imposible dar algo a un peruano sin ellos darme algo a cambio”. Tengo varios amigos que venden alimentos en el mercado y en la calles. Si trato de comprar algo de ellos, a menudo no aceptan mi dinero. Si ellos me dejan comprarles, la siguiente vez que paso a su lado insisten en regalarme por lo menos tanto como yo originalmente les había comprado.

Al llegar a la segunda casa, Manuela me saludó con un abrazo. Ella felizmente tomó el pastel de melocotón, y respondió: “Es un trueque entonces”. Antes de que pudiera responder, ella se fue dentro de la casa y salió con una taza de arroz zambito (la versión peruana de arroz con leche).

Arroz zambito
Arroz zambito de Manuela.

Le di las gracias por el arroz zambito y le dije que era muy amable, pero que no es necesario, ya que ella vende este arroz zambito como un ingreso para su familia. Manuela sonrió y me explicó la importancia cultural de un “trueque” (intercambio de bienes). Ella relató que se trata de un valor cultural transmitido por los incas que sigue siendo una parte integral de la cultura peruana.

 

A Rafael y a mí nos enseñaron algo muy similar en el curso intensivo sobre la realidad peruana que realizamos en Lima en 2012. Uno de los profesores nos enseñaban que la reciprocidad es un valor fundamental de la cultura peruana, un valor que tiene una base histórica derivada de los Incas, cuya economía se basaba en un sistema de trueque. Si alguien hace algo para usted, usted encontrará una manera de hacer algo beneficioso para ellos. Puedo ver este valor en acción en mi vida cotidiana aquí. Cualquier acto de servicio por mi parte me ha sido devuelto desinteresadamente, a menudo de maneras que superan cualquier cosa que haya hecho. Mi experiencia de la misión aquí en el Perú ha sido no de dar, sino de aprender a recibir con humildad lo que otros me dan. Las personas no dan de lo que les sobra, sino que dan de lo mejor que tienen para ofrecer.

Aji de gallina
Ají de gallina

Una de las mujeres del grupo de pastelería me dijo recientemente que le gustaría prepararnos el almuerzo a Rafael y a mí. Se detuvo por mi casa una mañana temprano y me dijo que no cocinara el almuerzo de ese día. A las 13:00, la hora de la comida peruana, llegó con dos platos rebosantes de comida para nosotros. Ella no había preparado cualquier comida. Semanas antes de hacer este almuerzo, ella casualmente nos había preguntado cuál era el plato peruano que más nos gustaba.

Este domingo pasado nos vino a traer esta misma comida, “ají de gallina”. Hay maneras de ahorrar al preparar este plato, pero sin que ella tuviera que decir nada, me di cuenta que había utilizado los mejores ingredientes del mercado. Yo estaba pérdida buscando algo que dar a cambio, pero no fue necesario. Este fue un regalo especial de amor que ella felizmente nos dio, sin esperar nada a cambio. Estoy continuamente sorprendida por la generosidad y la amabilidad de la gente, y su práctica del principio de “El Trueque”.

Emily Harrintong

Encuentro de los LMC en Nürnberg sobre la “Evangelii Gaudium”

Grupo LMC AlemaniaEl grupo LMC de Alemania nos encontramos en Nürnebrg en la casa de los Misioneros Combonianos del 17 a 19 octubre 2014. Ni siquiera la huelga de maquinistas pudo impedirlo 🙂 .

El sábado nos dedicamos al estudio intensivo de la encíclica “Evangelii Gaudium” con el apoyo de Pia Schildmair. El domingo destacamos los puntos comunes de la encíclica con la espiritualidad Comboniana. Buscamos impulsos específicos para cada uno (a) y para el grupo y acordamos los pasos para ponerlos en práctica. ¡Pedimos que la alegría del Evangelio continúe acompañándonos en el camino!

Barbara Ludewig

Ecos del Simposio Comboniano

ComboniSe celebró en Roma del 15 al 19 de septiembre la reflexión sobre la actualidad del Plan de Comboni para la regeneración de Africa pasados 150 años desde el momento en que fue escrito e inspirado. Para esta reflexión llegaron representantes de las diversas provincias de los Misioneros Combonianos (MCCJ), así como, asistieron representantes de las Hermanas Misioneras Combonianas (MC), Misioneras Seculares Combonianas (MSC) y Laicos Misioneros Combonianos (LMC).

A lo largo de esta semana de trabajo, hemos llegado a algunas conclusiones que servirán de “provocación” para el próximo capítulo de los MCCJ y que también nos pueden ayudar a una reflexión más profunda:

  • El Plan de Comboni se mantiene actual en la medida que nos permite darnos cuenta de las urgencias y prioridades de nuestro tiempo. Hacemos muchas cosas importantes, pero no podemos responder a todas las necesidades, por ello debemos discernir lo que es vital para el mundo de hoy y redimensionar nuestro servicio misionero en consecuencia.
  • Comboni tuvo la inspiración del Plan porque se colocó a los pies de la cruz. Hoy la misión ya no tiene un cariz “geográfico”, por eso, a los pies de la cruz debemos tratar de darnos cuenta de los movimientos del Espíritu y cómo respondemos a nuestro mundo, no importa dónde estemos llamados a estar.
  • El “Salvar África con África” no puede limitar nuestra acción. Más bien, debe llevarnos a adoptar una metodología renovada, a la medida de nuestras fuerzas. Por lo tanto, la misión en Europa implica re-creen en los valores de la cultura europea y adoptar su lenguaje como medio de liberación y evangelización. Lo mismo ocurre con otras culturas donde reconocemos como “vital” la presencia Comboniana.
  • “Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades “, dice el Papa Francisco en la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium (# 49). Con este llamamiento del Papa nos interpela a atrevernos a crecer y especializarnos dentro de los ministerios que consideramos que son los más urgente y prioritarios en el mundo actual.

Después de una semana de trabajo y reflexión, partiendo del Plan de Comboni y de las interpelaciones de la propia Iglesia, se concluyó que la misión de hoy pasará siempre, y sobre todo, por la lucha en favor de la Vida.

De esta manera, animados por el carisma de Comboni, estamos llamados a repensar y redimensionar nuestro ser misionero para que muchos “tengan vida y la tengan en abundancia.”

Susana Vilas Boas