Leigos Missionários Combonianos

Um retiro que nos leva a saborear a vida

El silencio es un don de Dios, un don capaz de dar mucho fruto a los que se atreven a "perder" tiempo para ganar calidad de vida, una vida plena que sólo Jesús puede darnos. Todavía estoy saboreando todo lo que escuché, medité y sentí en el retiro de Cuaresma organizado por los Laicos Misioneros Combonianos y orientado por el Padre Horácio Rossas, MCCJ. Como hemos mencionado anteriormente, este tiempo de Cuaresma y, en particular, el tiempo que estuvimos en el retiro, es un tiempo que Dios nos ha regalado para "perder" tiempo con Jesús. Pero en el fondo, quien quiso pasar tiempo con nosotros fue el mismo Jesús. Es increíble, ¿no? Jesús quiso pasar tiempo conmigo y con todo el que se atrevió a salir a su encuentro. Alguien tan importante como Jesús, alguien que es Dios, no sólo quieren saber de mí y quiere estar conmigo, ¡es él quien quiere pasar tiempo conmigo! Se nos invitó a reflexionar sobre varios pasajes bíblicos que nos propusieron. ¡Fue intenso! ¡Fue emocionante! Como ya he mencionado, ¡la vida espiritual necesita momentos de gran silencio exterior y gran trabajo interior! Y este retiro fue muy fértil en momentos de reflexión, en momentos de encuentro personal con Dios y en momentos donde sentir Su amor puro, de una manera tan grande, como aquel momento en que dejó nuestro corazón limpio, después de que el sacramento de la reconciliación. Nada es por casualidad y seguro de que no fue un accidente empezar escuchando al comienzo del retiro, las palabras del Salmo 63: "¡Oh Dios, tu eres mi Dios mío! ¡desde el amanecer ya te estoy buscando! Mi alma tiene sed de ti". Recuerdo como reflexionamos sobre nuestra insistencia en querer hacerlo todo por nosotros mismos. ¡Los discípulos echaron sus redes y no pescaron nada! Pero cuando Jesús aparece... Ah, cuando Jesús aparece, ¡todo cambia! Después de todo, ¡es Él que hace todo posible en nuestras vidas! Qué bueno es entender que todos mis miedos, mis inseguridades, todos los obstáculos pueden ser superados si confío en Dios, un Dios que es amor y que nos ama hasta la última gota de amor. Por otro lado, fuimos invitados a meditar en qué medida permitimos que Dios nos ame... El discípulo amado puedo ser yo, ¡puedes ser tú! ¡El discípulo amado es todo aquel que permite que Dios entre en su vida y se deja amar por Él! ¡El amor de Dios es un regalo gratis! ¡Él no nos ama porque seamos guapos o porque sólo hagamos el bien! ¡Él nos ama tal como somos! ¡Él nos ama con nuestras limitaciones! ¡Él nos ama con nuestros errores! Honestamente siento que Dios me ama a pesar de todas mis debilidades y todos mis errores, me da una alegría y una paz interior que sólo puede venir de Dios... ¡Nunca nos debemos resistir al amor de Dios! ¡Debemos dejarnos amar como somos! También nos invitaron a reflexionar sobre el Cristo resucitado porque quien no hace la experiencia de Cristo resucitado todavía no dio un saltó de fe. La fe en la resurrección nos da una nueva mirada a la realidad. ¡Llegamos a ver la vida de otra manera! ¡Creo, sinceramente que este retiro me ha ayudado mucho en el crecimiento de mi fe! Yo, en realidad, me encontré con Dios varias veces este fin de semana: en las diferentes explicaciones de la palabra de Dios; en las meditaciones personales; en misa; en la reconciliación; en la contemplación de la naturaleza... Terminamos el retiro con la celebración de la Eucaristía dominical. Como la mujer samaritana, todos pedimos a Jesús: "Señor, dame de esa agua". ¡Al final todo es por Él! ¡Gracias Jesús por invitarnos a pasar este hermoso retiro contigo! ¡Eres importante para mí, Eres importante para nosotros, Laicos Misioneros Combonianos! ¡Te queremos! También en la Eucaristía del domingo, la LMC Cristina Sousa, con la familia LMC, declaró su compromiso. También ella hace parte del plan que Comboni soñó, también ella es una de las mil vidas para la misión. LMC PortugalO Silêncio é um dom de Deus, um dom capaz de dar muitos frutos a quem se atreve a “perder” tempo para ganhar vida de qualidade, uma vida plena que só Jesus nos pode dar. Ainda estou a saborear tudo o que escutei, meditei e senti no Retiro de Quaresma organizado pelos Leigos Missionários Combonianos e orientado pelo padre Horácio Rossas, MCCJ.

Conforme nos foi referido no início, este tempo de Quaresma e, de modo particular, o tempo que estivemos em retiro, é um tempo que Deus nos deu a graça de tirarmos, para “perder” tempo com Jesus. Mas, no fundo, quem quis perder tempo connosco foi o próprio Jesus. É incrível não é? Jesus quis perder tempo comigo e com todos os que se atreveram a ir ao Seu encontro. Alguém tão importante como Jesus, alguém que é Deus, não só quer sabe de mim e quer estar comigo, como é Ele quem quer perder tempo comigo!

El silencio es un don de Dios, un don capaz de dar mucho fruto a los que se atreven a "perder" tiempo para ganar calidad de vida, una vida plena que sólo Jesús puede darnos. Todavía estoy saboreando todo lo que escuché, medité y sentí en el retiro de Cuaresma organizado por los Laicos Misioneros Combonianos y orientado por el Padre Horácio Rossas, MCCJ. Como hemos mencionado anteriormente, este tiempo de Cuaresma y, en particular, el tiempo que estuvimos en el retiro, es un tiempo que Dios nos ha regalado para "perder" tiempo con Jesús. Pero en el fondo, quien quiso pasar tiempo con nosotros fue el mismo Jesús. Es increíble, ¿no? Jesús quiso pasar tiempo conmigo y con todo el que se atrevió a salir a su encuentro. Alguien tan importante como Jesús, alguien que es Dios, no sólo quieren saber de mí y quiere estar conmigo, ¡es él quien quiere pasar tiempo conmigo! Se nos invitó a reflexionar sobre varios pasajes bíblicos que nos propusieron. ¡Fue intenso! ¡Fue emocionante! Como ya he mencionado, ¡la vida espiritual necesita momentos de gran silencio exterior y gran trabajo interior! Y este retiro fue muy fértil en momentos de reflexión, en momentos de encuentro personal con Dios y en momentos donde sentir Su amor puro, de una manera tan grande, como aquel momento en que dejó nuestro corazón limpio, después de que el sacramento de la reconciliación. Nada es por casualidad y seguro de que no fue un accidente empezar escuchando al comienzo del retiro, las palabras del Salmo 63: "¡Oh Dios, tu eres mi Dios mío! ¡desde el amanecer ya te estoy buscando! Mi alma tiene sed de ti". Recuerdo como reflexionamos sobre nuestra insistencia en querer hacerlo todo por nosotros mismos. ¡Los discípulos echaron sus redes y no pescaron nada! Pero cuando Jesús aparece... Ah, cuando Jesús aparece, ¡todo cambia! Después de todo, ¡es Él que hace todo posible en nuestras vidas! Qué bueno es entender que todos mis miedos, mis inseguridades, todos los obstáculos pueden ser superados si confío en Dios, un Dios que es amor y que nos ama hasta la última gota de amor. Por otro lado, fuimos invitados a meditar en qué medida permitimos que Dios nos ame... El discípulo amado puedo ser yo, ¡puedes ser tú! ¡El discípulo amado es todo aquel que permite que Dios entre en su vida y se deja amar por Él! ¡El amor de Dios es un regalo gratis! ¡Él no nos ama porque seamos guapos o porque sólo hagamos el bien! ¡Él nos ama tal como somos! ¡Él nos ama con nuestras limitaciones! ¡Él nos ama con nuestros errores! Honestamente siento que Dios me ama a pesar de todas mis debilidades y todos mis errores, me da una alegría y una paz interior que sólo puede venir de Dios... ¡Nunca nos debemos resistir al amor de Dios! ¡Debemos dejarnos amar como somos! También nos invitaron a reflexionar sobre el Cristo resucitado porque quien no hace la experiencia de Cristo resucitado todavía no dio un saltó de fe. La fe en la resurrección nos da una nueva mirada a la realidad. ¡Llegamos a ver la vida de otra manera! ¡Creo, sinceramente que este retiro me ha ayudado mucho en el crecimiento de mi fe! Yo, en realidad, me encontré con Dios varias veces este fin de semana: en las diferentes explicaciones de la palabra de Dios; en las meditaciones personales; en misa; en la reconciliación; en la contemplación de la naturaleza... Terminamos el retiro con la celebración de la Eucaristía dominical. Como la mujer samaritana, todos pedimos a Jesús: "Señor, dame de esa agua". ¡Al final todo es por Él! ¡Gracias Jesús por invitarnos a pasar este hermoso retiro contigo! ¡Eres importante para mí, Eres importante para nosotros, Laicos Misioneros Combonianos! ¡Te queremos! También en la Eucaristía del domingo, la LMC Cristina Sousa, con la familia LMC, declaró su compromiso. También ella hace parte del plan que Comboni soñó, también ella es una de las mil vidas para la misión. LMC PortugalFomos, pois, convidados, a reflectir sobre várias passagens bíblicas que nos foram propostas! Foi intenso! Foi emocionante! Como já tive oportunidade de referir, a vida espiritual precisa de momentos de grande silêncio exterior e de grande trabalho interior! E este retiro foi muito fértil em momentos de reflexão, em momentos de encontro pessoal com Deus e em momentos de sentirmos o Seu amor puro, de tal modo grandioso, como aquele momento em que deixou o nosso coração limpo, após o sacramento da reconciliação.

Nada é por acaso e de certeza que não foi por acaso termos começado por escutar, no início do retiro, as palavras do salmo 63, “Ó Deus, Tu és o meu Deus! Anseio por ti! A minha alma tem sede de ti”.

Recordo-me de reflectirmos sobre a nossa insistência em querermos fazer tudo por nós próprios. Os discípulos atiraram as redes e não apanharam nada! Mas quando aparece Jesus… Ah quando aparece Jesus, tudo muda! Afinal é Ele que torna tudo possível nas nossas vidas! Que bom é compreender que todos os meus medos, todas as minhas inseguranças, todos os obstáculos podem ser ultrapassados se confiar em Deus, num Deus que é amor e que nos ama até à última gota de amor.

Retiro LMC PortugalPor outro lado, fomos convidados a meditar até que ponto permitimos que Deus nos ame… O discípulo amado posso ser eu, podes ser tu! O discípulo amado é todo aquele que permite que Deus entre na Sua vida e se deixa ser por Ele amado! É que o amor de Deus é um dom gratuito! Ele não nos ama porque somos bonitos ou porque só fazemos o bem! Ele ama-nos como somos! Ama-nos com as nossas limitações! Ama-nos com os nossos erros! Sinceramente, sentir que Deus me ama, apesar de todas as minhas fragilidades e de todos os meus erros, dá-me uma alegria e uma paz interior que só podem vir de Deus…. Não devemos nunca resistir ao amor de Deus! Devemos, antes, deixarmo-nos amar assim como somos!

Fomos, ainda, convidados a meditar no Cristo Ressuscitado pois quem não faz a experiência de Cristo ressuscitado ainda não deu um salto na fé. A fé na ressurreição dá-nos um olhar novo sobre a realidade. Passamos a olhar a vida de modo diferente!

Acredito, sinceramente, que este retiro me tenha ajudado muito no crescimento da minha fé! Sinto, de verdade, que me encontrei com Deus várias vezes ao longo do fim-de-semana: nas várias explicações da palavra de Deus; nas meditações pessoais; na Eucaristia; na Reconciliação; na contemplação da natureza…

Terminámos o retiro com a celebração da Eucaristia dominical! Tal como a samaritana, todos dissemos a Jesus, “Senhor dá-me dessa água”. Afinal tudo é por Ele! Obrigado Jesus por nos teres convidado a passar este lindo retiro contigo! És importante para mim, és importante para nós, Leigos Missionários Combonianos! Gostamos muito de ti!

Também na Eucaristia dominical, a LMC Cristina Sousa, junto da família LMC, declarou o seu compromisso. Também ela faz parte do Plano que Comboni sonhou, também ela é, uma das mil vidas para a missão.

Retiro LMC Portugal

LMC Portugal

Maria Augusta escreve-nos de Mongoumba (RCA)

Maria Augusta LMCCaros LMC, amigos, familiares …

Eu e a Anna estamos bem, graças a Deus. O padre Fernando começou, hoje, uma nova malária… cada quinze dias fica doente, já são três medicamentos diferentes que toma… eu penso que terá malária resistente e terá de tomar medicamento diferente, mas antes deverá fazer exames em Bangui! O padre Samuel picou-o um bicho, não sei qual, nas costas, cresceu como um furúnculo e, agora sai pus. O médico receitou-lhe um antibiótico. Também tem malaria…

O padre Jesus está em Espanha, nos primeiros quinze dias acompanhou o cardeal e o Imã de Bangui que foram receber um prémio oferecido pela revista comboniana  “Mundo Negro” e ao mesmo tempo fazer animação missionária. Neste momento está com a sua família, que espero estejam bem, para que ele possa voltar na data prevista, 1 de Março de 2017.

A pequena Merveille voltou no dia 13 deste mês depois de dois meses de hospitalização. Fiquei impressionada pois voltou ao peso que tinha aos quatro meses 3,5kg e já pesava quase 5…Sofreu muito! Também lhe descobriram tuberculose que está a curar. Espero que venha a recuperar depressa o peso perdido. Que o Senhor faça o que for melhor para ela.

A estadia da LMC Irene correu bem, ela deseja voltar para partilhar a sua vida com este povo, durante mais tempo. Aprendi muitas coisas práticas com ela relativas à saúde com medicamentos e  produtos da natureza. Gostei de estar com ela, acho que é uma verdadeira comboniana. No dia 2 de Janeiro quando era para regressar o batelão avariou-se no meio do rio e foi, rio abaixo com quatro carros, parando a dois kilómetros. Só passados três dias voltou ao seu lugar e pudemos ir buscar o carro. Irene tinha o avião dia 3 foi preciso vir um padre de Mbaiki buscá-la, ela passou o rio na piroga. Nessa noite dormiu em Mbaiki e, muito cedo, no dia 3 partiu para Bangui, conseguindo assim viajar para Kinshasa. Foi uma grande aventura!

Do dia 23 de Janeiro até dia 15 de Fevereiro estiveram connosco o pai e a irmã da Anna que vieram visitá- la. Foi difícil a comunicação porque só falam polaco. Com gestos e tradução da Anna lá nos fizemos compreender um pouco. Que bom seria que houvesse uma língua que toda a gente falasse…

No Mês de Janeiro enviámos para Mbaiki 5 jovens da Paróquia para fazerem formação para depois ensinarem as crianças de 3 a 5 anos (pré-primária). Se correr bem serão abertas três classes em três aldeias.

Ontem trouxe para Mbaiki 3 casais, responsáveis das capelas, com seus 8 filhos mais pequenos, deixam tudo… O Senhor os recompensará!

Estamos a ajudar uma senhora pigmeia que tem um cancro do peito. Levámo-la a Bangui, ficou no hospital durante dois meses, foram feito muitos exames e por fim trouxeram-na para Mongoumba pior que partira. Todos os dias vem comer com os alunos pigmeus que vêm à escola, é feito o penso ao peito.  Damos-lhe um chá que ela diz estar a ajudá-la. Só um milagre a pode salvar, rezem por ela, por favor. Que Maria interceda por ela, junto de seu filho Jesus!

Já há dois meses que não saía de Mongoumba. Viajar cansa muito porque as estradas estão muito mal, cheias de buracos.

Desejo a todos os leigos e familiares uma boa Quaresma, santa conversão.

Maria Augusta LMC

Sempre unidos pela oração.

Um abraço Missionário.

Maria Augusta

Já com Espírito de Natal passamos mais um fim de semana juntos e em grande!

LMC Portugal

Nos dias 9, 10 e 11 de Dezembro realizou-se, em Santarém, mais um encontro dos Leigos Missionários Combonianos.

Já com espírito de Natal passamos mais um fim de semana juntos e em grande!

Cada encontro começa com as boas vindas, os abraços calorosos, os risos e gargalhadas de quem se reencontra com muita alegria e espera por a conversa em dia com cada elemento desta “família” que vai crescendo em número, em partilha e amizade.

No Sábado de manhã, depois da oração e do pequeno almoço, começamos com a exposição da leiga Rufina Garcia acerca do tema de reflexão: “Refugiados no mundo e em Portugal”. Depois de nos apresentar esta realidade tão atual, deu-nos a conhecer o seu trabalho na Cáritas de Portalegre, em jeito de testemunho, e do muito que há para fazer pelos refugiados que fogem de uma guerra, sem nada, esperando sobreviver e encontrar a paz. Seguindo o carisma de S. Daniel Comboni, e relembrando o desafio deixado no encontro europeu dos Leigos Missionários Combonianos, temos que estar atentos a esta crise e agir em conformidade.

LMC Portugal

Depois fomos convidados a colocarmo-nos no lugar de um refugiado vindo de um dos vários continentes, e construirmos uma árvore de Natal com os nossos desejos/sonhos. Só aprendendo a colocarmo-nos no lugar do “Outro “ é que podemos começar a sentir um pouco das suas dores e a despertarmos para a problemática destes refugiados.

De seguida recebemos o testemunho de um casal de refugiados do Paquistão, a Nádia e o Milam. Contaram-nos algumas das muitas dificuldades que atravessaram e atravessam. A Nádia chegou à cerca de um ano, fruto do esforço e empenho da Cáritas, mas não fala Português porque ainda não foi possível usufruir deste direito ao ensino da língua. O Milam, neste momento desempregado e motorista de profissão, chegou a Portugal há quatro anos, depois de seis longos meses em viagem. O seu maior desejo é adquirir a carta de condução de Portugal para que possa arranjar trabalho.

A tarde de Sábado foi preenchida com diversas atividades que nos sensibilizaram para as diferenças de poder económico dos vários continentes. Estas desigualdades são abismais! Por fim, fomos convidados a ir ao encontro do “Amor”, com um período de tempo destinado à reflexão e oração individuais.

LMC Portugal

À noite tivemos um convívio animado e em união com outros leigos não presentes, como a Marisa, com quem falamos longamente via Skype. Em espírito Natalício foi feita a troca de presentinhos e de desejos.

No Domingo juntaram-se a nós vários familiares e amigos para a celebração da Eucaristia. Depois ouvimos o testemunho da LMC, Élia, vinda recentemente da República Centro Africana onde esteve cinco anos em missão.

LMC Portugal

O tema foi: “O Natal na Missão”. A partilha da Élia, com a sua simplicidade e autenticidade, foi maravilhosa e enriquecedora, sobretudo para nós formandos que ainda não tivemos experiências de Missão. Outros leigos foram acrescentado breves partilhas de Natais vividos na Missão, no meio da pobreza mas com o verdadeiro sentido do Natal, sem materialismos, consumismos ou distrações que, nos países ocidentais, é impossível escapar. Ficou visível, em cada um de nós, o grande desejo de continuar a fazer este caminho de formação e partilha. A exemplo de Maria, mãe de Jesus, coloquemos a nossa total confiança no Senhor.

Continuação de um bom Advento para todos! Acolhamos Jesus que virá, quem sabe, na pessoa de um refugiado!

Por: Glória Rocha

 

Passagem por Bangui

Ania LMC

Viemos a Bangui para buscar a LMC Irene, que vem de Kinshasa, é congolesa, e ficará cerca de um mês connosco. Ela é muito simpática! Deus permita que nós consigamos dar-lhe bom testemunho da missão e que seja, para ela, uma experiência inesquecível de bem.

Trouxemos uma das órfãs a quem ajudamos com o leite, a pequena Merveille, que nasceu com 1,850 Kg. Tem agora 5 meses. Estava a crescer normalmente, pesando já cerca de cinco kilos. No dia dois apareceu com menos 900g, a avó disse que tinha tido diarreia. Mandamo-la à UNT e ficou internada. Estava desnutrida, tinha febre cada dia… O chefe do hospital, juntamente com outro Técnico de Medicina, Tenda, observaram-na e acharam que tinha meningite. Na quarta-feira foi passada a transferência para Bangui.

Sexta, chegámos à Emergency, uma ONG italiana que trabalha na pediatria do hospital de Bangui, cerca do meio-dia, e saímos de lá às quatro horas. Exames de um lado para outro, radiografia aos pulmões e Merveille fica internada nos cuidados intensivos com pneumonia, sintoma de meningite, anemia, malária. Imediatamente lhe começam a dar oxigénio. Com grandes dificuldades para tirar o sangue para as análises… Que o Senhor a ajude a recuperar depressa, se for essa a Sua Vontade! Que Ele a guarde. Graças a Deus, hoje, domingo, estava um pouquinho melhor, segundo o enfermeiro!

No dia 8 de Dezembro tivemos o encerramento do Ano da Misericórdia, com a participação de gente de toda a paróquia. Foi uma longa Eucaristia, três horas, mas toda a gente estava contente. Às seis horas da manhã rezámos o terço acompanhado por muitos cânticos, com a imagem de Maria na procissão passando por todas as comunidades de Mongoumba. Vislumbrava-se no rosto das pessoas grande alegria e devoção à Mãe do Céu!

O Jubileu das famílias decorreu muito bem. Houve catequese para pais e filhos. Foi bom ver  na Eucaristia os pais juntos com todos os filhos, habitualmente estão todos separados. No final da missa cada casal foi buscar um casal que ainda não recebeu o Sacramento do Matrimónio, ficando com a responsabilidade de os catequisar de modo a muito em breve também eles receberem o Sacramento.

Já temos carro novo! Graças à generosidade dos Missionários Combonianos de seis províncias, que partilharam connosco aquilo que lhes é oferecido pelos seus benfeitores. Agradecemos também a Deus por lhes conceder essas virtudes de ajudar, de ser solidário de amar.

Não se esqueçam de rezar por nós. Daqui rezamos por todos vós também.

DESEJAMOS A TODOS UM SANTO NATAL E UM BOM 2017 PLENO DE PAZ, ALEGRIA E MUITO AMOR.

Beijinhos das LMC

Anna e Maria Augusta (Mongoumba, RCA)

 

“A grandeza da missão não está naquilo que fazemos mas n`Aquele que nos envia.”

LMC Portugal

“A grandeza da missão não está naquilo que fazemos mas n`Aquele que nos envia.” Padre Ivo, Missionário Comboniano.

Em Viseu, nos dias de 18 a 20 de novembro, decorreu o terceiro encontro formativo que teve como tema: “A Missão hoje: Como? Porquê? Para quê? A Igreja em acto.”  A LMC, Susana Vilas Boas foi a formadora desta unidade.

A Susana começou a primeira etapa da formação por nos interpelar sobre esta frase do Padre Ivo, que depois foi o mote para todo o encontro formativo. Frase esta que nos transmitiu que somos enviados pelo Pai, que nos acompanha sempre e que é n’Ele que devemos depositar toda a nossa confiança.

LMC PortugalA mim, particularmente, deu-me a certeza que não estou numa caminhada sozinha, e que Ele me ajuda e estará sempre comigo trilhe eu o caminho que trilhar.

A vocação de LMC´s, tal como qualquer outra vocação cristã, não se restringe a um “Eu”, mas envolve um “Nós” e isto é muito bonito de se descobrir e de se sentir.

O encontro ramificou-se em dois grandes subtemas: o 1.º Actos dos Apóstolos e o 2.º Diretório dos LMC´S.

Gostei imenso da abordagem ao livro dos Actos dos Apóstolos. Vimos, com a Susana, toda a estrutura do livro, alguns dos acontecimentos mais significativos, aspetos históricos e depois num pequeno trabalho de grupo foi possível aprofundar alguns dos acontecimentos narrados por Lucas.

Na tarde de sábado depois de uma partilha e interpretação dos grupos, iniciamos o segundo tema, um momento bom para esclarecimento de algumas dúvidas e alguns aspetos cruciais no caminho da formação como LMC.

Já à noite, convivemos, brincando com um jogo de mímica sobre os Actos dos Apóstolos, momentos de partilha, conversas, … e brincadeiras.

No domingo de manhã, foi fantástico poder ouvir Márcia Costa, que nos contou como e quando se juntou aos LMC´S, a reação da sua família, quando decidiu partir para a República Centro Africana, o que viveu e o que encontrou, foi bom ouvir a Susana também e conhecer um pouco mais de perto a realidade que enfrentaram, os desafios. Um belo testemunho também do casal  Ana e Artur Valente, que já depois da reforma dedicaram as suas vidas ao serviço das Missões.

Muito bom… Magnífico perceber que não há idades específicas, que estamos todos a tempo de fazer o bem, de fazer a diferença.

LMC Portugal

Por Sofia Coelho