Laicos Misioneros Combonianos

¿QUÉ ES LA ORACION?

Uganda
Uganda
Cristianos orando en la Gruta de María nuestra Madre

Mucho se dice sobre la oración y mucho se ha dicho sobre la oración. Las redes sociales están llenas de oraciones y muchas personas hacen preguntas sobre la oración. Admiramos la vida de muchos santos, vivos y muertos. Lo que es sorprendente acerca de las personas cuyas vidas reflejan la gloria de Dios, como Santo Padre Pío, Santa Madre Teresa y muchos otros es que se consideraban pecadores y que no sabían cómo orar. Nuestro propio Papa Francisco, cuya vida ha conmovido a muchos y muchas personas lo siguen en las redes sociales, se considera pecador y siempre le pide a la gente que ore por él. Muchas personas han dedicado sus vidas a la oración y aún continúan orando sin cesar. Por todo ello la pregunta sigue en pie, ¿qué es la oración y cómo podemos orar?

Según el Oxford English Dictionary, la oración se define como una práctica de comunicación con el propio Dios. Otras personas pueden decir que la oración es una conversación silenciosa o en voz alta con el Dios invisible. No importa cómo oremos y el método que usemos, todo apunta a hablar con Dios.

Muchas sectas religiosas diferentes llevan a sus seguidores a orar de maneras particulares para alimentar la espiritualidad de sus seguidores. ¿Cuál es entonces la diferencia entre religión y espiritualidad? Muchos estudiosos tienen diferentes enfoques para definir la espiritualidad, aunque todos están de acuerdo en lo que es la religión. La religión puede ser sencilla, diferentes personas reunidas bajo el mismo techo para orar juntas de una manera apropiada para ellas. En la Iglesia Católica, nuestra oración principal es la Celebración de la Sagrada Eucaristía en la Santa Misa. Otras religiones diferentes tienen sus propias ceremonias según lo que consideran adecuado para ellos .La espiritualidad, en términos simples, puede ser lo que más importa al ser interior de una persona, lo que habita en su interior, lo más deseado , más valorado en lo íntimo de una persona y que la persona no puede hacer nada sin él. Muchas personas consideran en ese grado de intimidad al dinero, al amor por los hijos, el cónyuge, el trabajo, los automóviles, los ídolos, los teléfonos o las tabletas, las computadoras, los espíritus de los antepasados, que son muy importantes en África y en otras partes del mundo .Se dice que esta cosa tan íntima que ocupa la mente y la vida de la persona es su espiritualidad .Lo que necesita una persona para consolarse en términos de profundidad es la espiritualidad. Algo que hace a alguien entrar en su intimidad constituye la oración para esta persona. Algunas personas recurren a brujos o espíritus ancestrales para buscar respuestas rápidas a sus necesidades. Como misioneros, nos encontramos con estas personas y hay veces que encuentras en medio de la Santa Misa a personas que se ponen a consultar su teléfono. Hay ciertas situaciones en las que la persona puede llevar las oraciones y seguir el orden de la Misa o las canciones que puede llevar en su teléfono. Entonces, ¿qué sería lo íntimo para ti en tu vida como misionero? Si tienes distracciones cuando quieres concentrarte en la oración, quizás haya que revisar tu espiritualidad y por tanto necesitas orientación sobre cómo superar esto y tener los métodos adecuados de oración .Una verdadera oración se consigue cuando toda tu atención y tu ser se sienten atraídos por Dios o las Escrituras en las que ha elegido enfocarte. Sin embargo, hay veces que una persona no se siente en la oración como se explica, aun así la intención en la oración siempre debe persistir para orar a Dios, como veremos más adelante en este artículo. No se trata de estar con otros. Por lo tanto, la religión ayuda a dirigir la espiritualidad de una persona hacia Dios, centrándose en Dios y no en ningún otro consuelo cuando lo necesite. Una persona espiritual nos dice que busquemos a Dios en consolaciones pero no en consolaciones de Dios. Esto nos lleva a enfocar toda nuestra atención a Dios cuando estamos en oración, cuando surgen los desafíos; colocamos nuestra atención en Dios y no en otras cosas .En un Himno muy hermoso que cantamos, Jesús nunca falla… las cosas de este mundo te defraudarán pero Jesús nunca falla… lo cual enfatiza la importancia de enfocarte en Dios más allá de enfocarte en cosas terrenales que todas tienen un fin, en caso de que tengamos un problema importante en nuestra vida.

¿Qué dicen otros sobre la oración?

Soren Kierkegaad dijo que en una verdadera oración, no es Dios quien oye lo que se le pide, sino el que reza si continúa orando conseguirá escuchar lo que Dios le tiene que decir. Por tanto, en la oración no necesitamos buscar soluciones rápidas a nuestras peticiones, sino rezar hasta que suceda algo. Es importante orar siempre y no perder el corazón Lc. 18: 1. Es importante siempre rezar sin fatigarse, enfocar nuestra atención en Dios en cuerpo y mente.

Jesús nos aconseja que seamos persistentes en la oración. Al igual que la amistad, la oración requiere tiempo, esfuerzo y sacrificio .En nuestra vida cristiana, nunca deberíamos hablar de éxito sino de fidelidad a Él y a su Palabra, incluso si no obtenemos lo que hemos pedido. La verdadera oración no tiene ninguna condición, debemos orar y seguir orando en todo momento, incluso si no conseguimos todo lo que queremos. En todo lo que oramos, es muy importante pedirle a Dios que se haga su voluntad en nuestra vida, no lo que pedimos él en nuestra oración. Siempre le pedimos a Dios que responda nuestras peticiones, pero debemos recordar que ponernos al servicio de Dios, debemos preparar nuestra alma para la tentación con todo lo que enfrentamos en la vida.

Muchas veces como misioneros enseñamos a otros a orar, les mostramos cómo vivir como cristianos, pero podemos no aprender a orar nosotros mismos. Por ello, le pedimos a las personas que recen por nosotros. Esto es muy bueno, pero debemos ser conscientes que el corazón de la oración está en el individuo y los otros intercederán por nosotros solo para añadir lo que ya tengamos en nuestro corazón.

¿Por qué rezamos?

Muchas personas tienen razones para orar y tenemos que entender que hay muchas razones por las cuales las personas rezan .Algunos rezan por conseguir un cónyuge, mejorar en los negocios, tener éxito en lo académico, conocer a Dios, encontrar la vocación en la vida, por el alma de los fallecidos, especialmente por aquellos en el purgatorio. Cualquiera que sea la razón, debemos centrar nuestra oración en lo expresaron nuestros autores en espiritualidad:

Personalmente, algunos de los motivos por los que rezamos incluyen;

  • El perdón de nuestros pecados, pecados que cometemos todo el tiempo y por los que nuestra oración debe pedir perdón como Jesús dijo … vengan a mí todos los que están sobrecargados y les daré descanso Mt 11:28
  • El amor de Dios. Tenemos que orar por la perseverancia en el amor de Dios, ya que nuestro amor humano es condicional y centrado en nosotros mismos en la mayoría de los casos de nuestra vida.
  • El amor por la oración, cuando persistimos en la oración, tendemos a sentir amor por la oración como parte de nuestras vidas.
  • Para encontrar perseverancia y paz. Las miradas desprotegidas a menudo son la causa de los pecados graves, como dijo un maestro espiritual. A menos que tengamos paz en nuestras vidas, no podemos entender lo que significa la verdadera paz en la vida de otras personas

Por la Iglesia;

  • Para glorificar a Dios, venerar a la Santísima Virgen María, a los Ángeles, a los Santos y a muchos otros.
  • Por las necesidades espirituales de los hijos de Dios
  • Por la liberación de las almas en el purgatorio

Para vivir y rezar bien, nuestros líderes espirituales nos animan porque el alma devota debe ser pura, honesta, transparente en todo lo que hacemos con nuestras manos, labios, ojos, oídos y todo el cuerpo. San Pablo nos dice “tu cuerpo es el templo del Espíritu Santo, ¿que está en ti y a quien recibiste de Dios? 1 Cor. 6:19. Como seres humanos, no es fácil conocernos a nosotros mismos de manera transparente, como John Powel SJ dijo ” revelarme a mí mismo, abierta y honestamente, requiere la valentía más pura”. La mejor oración es aceptar y creer que no somos nada ante Dios y no somos más que pecadores y orar por su misericordia y perdón.

Debemos saber que no hubo nada que Jesús haya hecho sin orar y nosotros tampoco podemos hacer nada sin oraciones en nuestra vida, como lo que Jesús pasó en el desierto Mt.4: 1-11 .Una buena oración es donde nos sentimos libres de derramar nuestro corazón sin temor. La oración puede ser compartir una relación con Dios y algunas personas solo necesitan estar en presencia de Dios

Hay una historia de Simon Makonde que nació en domingo, bautizado el lunes, se confirmó el martes, se casó el miércoles. Se enfermó el jueves, fue llevado al hospital el viernes, murió el sábado y fue enterrado el domingo. Esta historia muy imaginaria explica que el viaje de la santidad no es algo muy corto. Tiene que ser probado por el tiempo y los desafíos. Lo que importa es dónde estarás al final de los tiempos, en el infierno o el cielo. Para orar bien, San Alfonso María de Ligorio nos dice que debemos centrar nuestra atención en ese día en que moriremos, ya sea cerca o lejos, en una muerte dolorosa o pacífica, solo o en el cuidado de los demás. Cuando muramos, ¿cuál será nuestro destino en el último día del juicio? Mt. 25: 1-13 Para orar bien siempre miramos a nuestra muerte o al juicio final. Debemos vivir una vida basada en las bienaventuranzas y las enseñanzas de la montaña Mt.5. 1-12

¿Dónde vemos a Dios en nuestra vida?

Dios está en todas partes y podemos encontrar a Dios en todo lo que hacemos y en las personas que conocemos. El hecho de que pueda leer este mensaje significa que está bendecido entre miles de millones de personas en el mundo que no tienen acceso a Internet, ni a una computadora, tiene ojos capaces de leer en comparación con millones de personas ciegas, bendecido porque pertenece a un grupo que tiene una gran preocupación el uno por el otro. Todo esto exige un gran agradecimiento a Dios. Cuando miras la naturaleza, los árboles, la arena, los animales, los pájaros, el agua, el viento y las corrientes de agua fría / caliente son todas formas en que podemos apreciar a Dios en las criaturas como lo hicieron San Ignacio y otros santos. Se cuenta una historia de San Ignacio cuando una noche se asomó al balcón de su casa y al levantar la mirada para mirar las estrellas las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas con los ojos fijos en las estrellas. Esto es algo bueno donde podemos tratar de identificar a Dios en nuestra vida.

PRINCIPIOS DE LA ORACIÓN

Los maestros espirituales aportaron algunos puntos para ayudarnos y guiarnos en nuestra oración. Estas son solo algunas sugerencias pero que personalmente me han ayudado mucho.

  1. La oración es una relación interpersonal con Dios. Tiene que ser sentido en el interior de la persona pero no necesariamente escuchar un menaje con lo que se debe hacer. Cuando rezas debe encontrar un sentimiento interior en tu corazón. Usa pocas palabras y sé concreto.
  2. La oración es una comunicación afectuosa con Dios realizada a través del Espíritu Santo y sostenida por el Espíritu Santo. Debemos estar listos para entregarnos al Espíritu Santo para que tome el control de nuestras vidas .La oración debe venir de la mente y del corazón. Cuando ores, esfuérzate por perdonar a todos los que te ofenden y pide perdón por todo lo que pudiste haber ofendido para tener una buena vida de oración Mt. 6:12, y San Pablo nos dice que oremos con el espíritu que intercede por nosotros Rom. 8:26.
  3. Aprender a agradecer a Dios es el principio más simple pero importante. El que no hace agradece no es bienvenido ni apreciado. Para que nuestra vida de oración sea buena, debemos estar agradecidos a Dios y a otras personas en nuestra vida, y esta apreciación se dirige a Dios en nuestra oración.
  4. La oración es sobre todo una expresión de amor. Gracias a Dios por todo lo que ha hecho en tu vida y te ha entregado. Ora por el empoderamiento que supone pedir la gracia de Dios sobre tus decisiones. Ama con actos de caridad a Dios y a los hermanos y siempre pregúntale a Dios “¿qué es lo que quieres de mí? ¿Qué puedo hacer en esta situación?”
  5. La oración es hacer que el poder de Dios baje en nuestras debilidades y dificultades Ef. 6:11. Busca soluciones antes de pedir ayuda a Dios .Cuando sentimos que somos débiles, lo mejor que podemos hacer es invocar el poder de Dios en nuestras debilidades y suplicarle su perdón y misericordia por haber pecado contra él.
  6. La oración de simple presencia o oración de silencio es muy importante, es decir, ponte en la presencia de Dios sin palabras. Dedica un tiempo tranquilo, en la presencia de Dios, sin decir una palabra y sin tener nada que ocupe tu mente. Pon toda tu presencia a Dios en Adoración.
  7. El corazón de la oración está en escuchar. Escucha la voz de Dios hablándote
  • Nuestra mente, que debe estar clara y sin pensamientos negativos, debe enfocarse solo en Dios y en las maravillas que Dios ha hecho por nosotros. No pensar en venganzas, en cometer o planear un crimen. Dios siempre usa formas normales de hablar con nosotros, solo escucha y sigue lo que obtienes. De esta manera, debemos ser conscientes de las falsas voces positivas del diablo. Encontrarte con tu acompañante espiritual es necesario para discernir las voces de Dios o del diablo
  • Tu voluntad de hacer algo ¿Qué es lo que siempre deseas hacer?¿Es agradable a Dios según lo que la iglesia nos enseña a hacer? Un amigo que le da un buen consejo tanto en el aspecto espiritual como en otras áreas de la vida es Dios hablando con usted a través de ese amigo. Siempre debemos escuchar a las personas que nos hablan en nuestras comunidades u otros lugares sobre nuestro carácter, sobre lo que debemos conservar, y lo que necesitamos dejar en cuanto a nuestro carácter.
  • Tus emociones, ¿cómo son, felices o arrepentidas, contentas o insatisfechas?
  • ¿Qué estás imaginando siempre en tu vida, tanto pública como privada? ¿Te imaginas conversando con Jesús, la Madre María y los Ángeles o algo opuesto a lo que se sugiere aquí?
  • ¿Qué hay en tu memoria en lo que siempre piensas, algo que agrada a Dios o que agrada al diablo?
  • Cristo también nos habla a través de su propia vida personal que leemos de la Santa Biblia y la aparición que la Iglesia Católica aprueba que los católicos sigan
  • Él nos habla a través de los Profetas y lo que nos ofrece la Iglesia Católica, especialmente a través de las encíclicas del Santo Padre, el Papa.
  1. El lugar y el tiempo son importantes para orar y deben ser propicios. Sin embargo, no necesitas siempre estar en silencio para rezar. Simplemente desconecta el ruido de tu mente en medio de un lugar ruidoso si se trata de tu voluntad de orar.
  2. Luchar con problemas en la oración, en forma de distracciones en la oración, es muy normal y siempre es de esperar en nuestra vida humana. Pero esto no debería hacer que abandones tu oración y comunicación con Dios. Tales distracciones incluyen sueño, pensamientos y muchas otras cosas, pero solo reza para superarlas. Nuestros líderes espirituales nos animan a persistir en la oración incluso si llegan las distracciones. Una razón por la que nos dormimos en oración es porque vamos a orar cuando ya estamos cansados ​​de lo que hicimos durante el día. Esto puede requerir un cambio en su horario de oración o es un signo de un cuerpo cansado y agotado. Por lo tanto, debe tomar un descanso de lo que hace y tomar un retiro que pueda nutrirlo y hacerlo capaz de comunicarse con Dios en oración. Si siempre reza en las horas de la tarde un cambio a la mañana temprano podría ser de ayuda. Dicen que lo que importa en la oración es la intención, aunque el camino puede no ser apropiado y tener tanto en cuenta para su intención de oración importa mucho y Dios escucha esas oraciones incluso con muchas distracciones.
  3. El Padrenuestro debe convertirse en la base de una oración cristiana tal como nos la enseñó nuestro Señor Jesús. Nunca debería ser recitado, sino meditado. La oración del Padrenuestro cubre toda nuestra vida si se la medita de palabra en palabra y esta debería ser nuestra raíz de la meditación diaria.

Hay muchas maneras en que podemos orar en un grupo desde el oficio divino, oraciones familiares recitadas en grupo y oraciones mentales que se han visto útiles en la vida de oración. Todos los santos practican la oración mental o la meditación diariamente, tanto los santos que viven como los ya muertos. Tales meditaciones pueden enfocarse en determinar la voluntad de Dios en nuestras vidas o incluso encontrar a Dios en lo que hacemos como lo sugiere San Ignacio de Loyola. Si usted es agricultor necesita ver a Dios en las plantas y animales que cuida, un maestro encuentra a Dios en los alumnos o estudiantes a los que él /o ella enseña, un matrimonio debe encontrar a Dios en la vida del cónyuge y de los hijos y en el hogar y muchos otros ejemplos en todo el trabajo que hacemos. San Ignacio sugiere en sus Ejercicios Espirituales imaginar a alguien caminando junto a Jesús o asistiendo a su sermón en la montaña o hablando sobre el juicio final. ¿Qué preguntas le harás o caminarás con el Señor Jesús en su Pasión en el huerto, en el camino al Calvario?, ¿cómo crucificaste a Jesús hasta ahora y cómo pretendes reconciliarte con él? lamentando tus pecados y pidiendo perdón. Estas son solo sugerencias menores, pero cada persona debe encontrar la mejor manera de orar y meditar guiados por el Espíritu Santo en las oraciones personales.

¿Por qué la oración mental y qué constituye una oración mental?

Sin la oración mental, un alma no tiene luz. Alguien dijo “aquellos que mantienen los ojos cerrados no pueden ver el camino de su país”. Necesitamos darnos cuenta de que las verdades externas son todas cosas espirituales que se ven no con los ojos del cuerpo sino con los ojos de la mente por reflexión y consideración, como nos dice un escritor espiritual. San Bernardo nos dice que la meditación regula los afectos, dirige las acciones y corrige los defectos. Un santo durante su vida dejaba morir de hambre al cuerpo durante semanas si su cuerpo se dejaba llevar por la lujuria o los deseos de la carne y castigaba el cuerpo sin comida o bebida hasta que estuviera muy débil y le pregunta al cuerpo si podía vencerlo Dios en sus meditaciones, para la perfección en la vida dirigida a la santidad. Esto puede enseñarnos una lección sobre la superación de los males en nuestra vida con el ayuno. Jesús derrotó al diablo en el desierto con ayuno y oración, y esto nos puede enseñar algo para aprender sobre cómo lograr la santidad en la vida.

Santa Teresa del niño Jesús dijo que aquel que descuida la oración mental no necesita un demonio para llevarlo al infierno, sino que él mismo se lleva allí con sus propias manos. Abbot Diodes dijo algo similar, que el que omite la oración mental pronto se convierte en una bestia o un demonio. San Pablo nos avisa que sin peticiones de nuestra parte, Dios no concede la ayuda divina y sin la ayuda de Dios no podemos observar los mandamientos 1 Tesalonicenses 5:17 que debemos orar sin cesar. Esta oración viene mejor en meditaciones.

San Juan Crisóstomo dijo que por medio de la oración podemos obtener de Dios sus gracias; sin oraciones es absolutamente imposible llevar una buena vida. El descuido de la oración mental es la causa de la gran relajación de la moral que presenciamos todos los días, incluso en algunas de nuestras comunidades y familias religiosas. Dios desea ser preguntado, cuestionado y hasta vencido por cierta inoportunidad en la oración. La caridad no puede perdurar a menos que Dios le dé perseverancia, ¿cómo nos dará el Señor perseverancia si nos negamos a pedírselo? Santa Teresa nuevamente dijo que sin oración mental no hay comunicación con Dios por la perseverancia de la virtud. El Cardenal Bellarmino dijo que es imposible para quien descuida la oración mental vivir sin pecado. San Agustín dijo que para obtener la misericordia y la gracia divinas, no es suficiente orar en lenguas, también es necesario orar con el corazón. La oración mental hace que uno vea su propia miseria y regrese a Dios. La oración mental hace un alma; modesta, humilde, devota y mortificada en todas las cosas. La falta de oración mental lleva al orgullo, a la falta de devoción, a no frecuentar los sacramentos y la Iglesia, a apegarse a la vanidad, a conversaciones inútiles, a tiempos pasados, a placeres terrenales. San Juan Crisóstomo nos dice nuevamente que aquel que no le reza a Dios o no desea disfrutar de su conversación divina está muerto… un alma muerta no puede ser penetrada por Dios. La oración mental es la raíz de una vid fructífera. San Climaco dijo que la oración es un baluarte contra el asalto de las aflicciones, la fuente de las virtudes, el que procura las gracias. Y Santa Ruffina se hace eco de un punto similar cuando dice que todo el progreso espiritual del alma fluye de la oración mental, y Gerson dijo que aquel que descuida la meditación no puede, sin un milagro, llevar la vida de un cristiano. San Ignacio de Loyola notó que la oración mental es el camino más corto para alcanzar la perfección y quien más avanza en la meditación logra el mayor progreso en la perfección.

Algunas virtudes mostradas por personas que viven una vida de meditaciones incluyen las siguientes, pero no se limitan exclusivamente a esto;

  • Humildad y un gran corazón para perseverar en la vocación como lo hicieron San, Daniel Comboni y otros santos vivos y muertos .San Bernardo dijo que el hombre verdaderamente humilde no desea ser anunciado como un hombre humilde, sino que desea ser reputado y considerado inútil.
  • Siente el sufrimiento de los demás y sé capaz de sanar de la forma que te resulte más conveniente.
  • Ten un corazón disponible a los demás incondicionalmente
  • Ama a los pobres y al sufrimiento
  • Confía en el Sagrado Corazón de Jesús y en el Inmaculada Corazón de María en todo momento
  • Siempre sea positivo con las personas y sus problemas tanto a nivel personal como con los demás también
  • Comparta sus desafíos y logros, la vida con los demás, siempre tenga en mente que la fe sin acciones y buenas obras en una relación están muertas
  • Siempre están tranquilos, felices, tienen visiones para el futuro, tanto buenas como malas, confían en Dios en todo momento y en todas las circunstancias que atraviesan en la vida

Por lo tanto, un buen cristiano debería;

  • Nunca tema caer y cuando caiga mire directamente a Jesús por el perdón de sus pecados que comete todo el tiempo. Esto los acerca tanto a la perfección que es un paso adelante hacia la santidad.
  • Mira la cruz todo el tiempo. Cada vez que miras a Jesús en la cruz, llenas tu mente de pensamientos sobre su pasión y muerte y te pones en una posición de pensar acerca de los pecados que cometes que todavía clavan a Jesús en la cruz todos los días
  • Reza todo el tiempo ya sea en el pecado, la santidad, las tristezas, las alegrías y en cualquier condición en que se encuentre en la vida
  • Tenga un acompañante espiritual con quien estar en contacto en todo momento cuando lo necesite o no lo necesite, sino como guía durante toda su vida.
  • Renueve sus promesas bautismales, compromisos y votos todo el tiempo
  • Sabe que es muy difícil ser cristiano, pero puede seguir adelante y pedir la Gracia de Dios para hacerlo.

Las virtudes que ayudaron a los santos a perseverar en su fe fueron, pero no se limitaron a ellas;

  • Una inquebrantable fe en Dios y entrega de sus vidas en manos de la divina providencia
  • Tenían la esperanza en cada situación de que la mano de Dios estaba en sus vidas y, por lo tanto, el miedo, la muerte, las persecuciones no eran un problema para que tuvieran miedo en la vida y, como tales, daban sus vidas libremente por Dios.
  • Fueron caritativos con su vida, su tiempo, sus inquietudes, sus oraciones, y dieron todo a los necesitados.
  • Amaban incondicionalmente a los necesitados en todo momento y no estaban apegados a nada de este mundo, es por eso que otros dieron todo lo que tenían a los pobres y necesitados y vivieron una vida sencilla, algo que vale la pena que pensemos sobre nosotros.

Por tanto, necesitamos un corazón que arda por amor a Dios y a nuestro prójimo Lc. 10:27 .Por tanto, necesitamos una relación muy fuerte con Dios, los seres humanos, el entorno, para hacer lo que es agradable a Dios, ya que todos son criaturas y obras de las manos de Dios. Por tanto, debemos tener cuidado con la presencia de Dios con nosotros en todo momento tanto en la vida pública como privada, especialmente en todo lo que hacemos. Santa madre Teresa dice que al final no se trata de cuántos certificados y diploma tenemos, sino de cuánto amor pusimos en todo lo que hicimos. Entonces, sobre todo, debemos tener amor en nuestro corazón para poder agradar al Señor en todo lo que hacemos.

Para progresar en la oración mental, debemos tener cuidado con el Orgullo en nosotros que viene cuando sentimos que somos todo, que nadie sabe lo que sabemos, que somos perfectos en todas las cosas y más ricos en dinero, bendiciones y virtudes que otros Lc. 18: 9-14. Como misioneros, nuestra actitud debería ser la del recaudador de impuestos y decir: “Dios, sé misericordioso conmigo que soy pecador…”. Los santos saben que Dios es el autor de todas las cosas buenas y viven una vida humilde. San Bernardo volvió a decir que el orgullo es menos odioso en los ricos que en los pobres, entonces ¿quién eres? ¿eres el rico orgulloso de su dinero, orgullo, celos, odio, lujuria?

Efectos del orgullo

  • Terminar creyendo solo en ti mismo, sin necesitar la ayuda de Dios y de los demás, y atribuyéndote todo el mérito de las cosas, aunque sea a expensas del esfuerzo y el sudor de los demás.
  • Desmesurada ambición que se vuelve un vicio que nos hace buscar nuestro propio honor con una avidez sin medida. Tenemos que evitar el atribuirnos méritos y confesar que los honores que recibimos se deben a Dios, solo estamos al servicio de nuestros vecinos.
  • Solemos ser muy ambiciosos. San Ambrosio dijo que las ambiciones a menudo crean criminales de aquellos a quienes ningún vicio deleitaba, a quienes ninguna lujuria podía mover, a quienes ninguna avaricia podía engañar.
  • La envidia, que es la tristeza que surge de la contemplación del bienestar de nuestro prójimo
  • La gloria vana, que es un apetito desmedido de alabanza, desea que nuestros méritos resplandezcan con gloria
  • La fanfarronería, es decir, el deseo de ser honrado por encima de los demás, se alaba y exalta a sí mismo, exagerando y amplificando las cosas para hacer que sus méritos parezcan mayores de lo que realmente son.
  • La hipocresía, que demuestra externamente una virtud y santidad que realmente no poseemos.
  • La desobediencia, es decir, ir en contra de nuestros superiores/coordinadores, tratándolos con desprecio, como inútiles.
  • La discordia: discrepancia de la voluntad que le impide ajustarse a la voluntad de Dios y al bien de nuestros vecinos.

Estos son algunos frutos del orgullo en nosotros y la manera de superarlos es practicar todo lo que se ha descrito en este artículo que se puede resumir como;

  • Evite hablar mal de los demás
  • Deja de sentir celos por los demás
  • Su calificación académica de PHD, Masters, bachillerato… no debe ser para pisar a los demás.
  • Si ha orado y rezado pero no has conseguido lo que quieres, cambie su actitud.
  • En sus trabajos, su hogar, su comunidad, ¿las personas lo ven como una inseguridad, seguridad o ven a Cristo en usted o el diablo?
  • Las grandes obras hacen que Cristo brille en ti y en todo lo que haces.
  • Ora para que Dios te dé esa gracia para perseverar en la oración y buenas virtudes cristianas.
  • Recuerde siempre que los santos más grandes querían que cualquiera que los viese sintiera paz y estaban siempre allí para las preocupaciones y necesidades de los demás.

Para resumir todo esto, permítanme compartir con ustedes el mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma del 2017, que si podemos tratar de vivirlo en nuestra vida diaria, puede ayudarnos a encontrar la paz en nuestras mentes entre todo lo que hacemos todo el tiempo de nuestra vida No solo es aplicable en cuaresma, sino que debe ser una regla de vida para cualquier ser humano que todavía viva; es decir, son resoluciones excelentes para una vida cristiana a diario;

  1. Ayune de palabras que lastiman y diga palabras amables
  2. Ayune de la tristeza y esté lleno de gratitud y alegría
  3. Ayune de la ira y esté lleno de paciencia
  4. Ayune del pesimismo y esté lleno de esperanza (las personas no pueden cambiar fácilmente como querrían)
  5. Ayune de preocupaciones y confíe en Dios
  6. Ayune de preocupaciones y contemple la simplicidad
  7. Ayune de las presiones y sea más devoto
  8. Ayune de amargura y llénese de alegría
  9. Ayune de rencores y reconcíliese
  10. Ayune de venganza y sea misericordioso
  11. Ayune de egoísmo y preocúpese de compartir
  12. Ayune de palabras y manténgase en silencio para que pueda escuchar (hablar menos y escuchar más)

Que escriba todo esto no significa que practique todo esto, soy mucho peor que usted que lee estas palabras.  Necesitamos orar el uno por el otro para que podamos hacer nuestro trabajo misionero en la vida de entrega total a Dios y a nuestro prójimo.

Meditemos sobre estas palabras de Jesús en las apariciones de Vassula Ryden (2005) en La verdadera vida en Dios ​​un consuelo para nosotros es “… ¡ no temas, oh pecador !Si por tus pecados te has hecho esclavo del infierno y eres incapaz de liberarte, ofréceme a mi Padre Eterno y escaparás de la muerte “.Nuestra Madre María también repitió las mismas palabras en el mismo libro cuando dijo: “… si aquí está mi hijo, esfuérzate por salvar tu alma ofreciéndole con frecuencia a Dios”.

Que nuestra Madre María nos enseñe la meditación y la contemplación que hicieron su vida aquí en la Tierra .Oremos al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María para ayudarnos y guiarnos en este camino de descubrir nuestra verdadera identidad como misioneros en busca de la verdad y ofreciéndonos esta verdad a nosotros mismos y luego a los demás, Amén.

Demos la Gloria a Dios por todo lo que somos, o estamos viviendo ya sea bueno o malo.

Ezati Eric, LMC Uganda

Retiro Cuaresmal de los LMC de Uganda

lenten recolation UgandaSaludos de los LMC ugandeses. Esperamos que todos estén bien. Nosotros estamos caminando bien con la gracia de Dios.

Tuvimos nuestro retiro Cuaresmal en nuestra comunidad apostólica en la Parroquia de Mbuya, Nuestra Señora de África, que fue dirigido por el Padre. John Bosco Nambasi – MCCJ con el tema la Relevancia de la Vida Religiosa en la Sociedad de Hoy – 1 Reyes 3: 4-13 y Mt. 6:30

Él nos mostró muchas características de nuestro mundo que afectan a nuestra vida de oración y cómo vivir en armonía con nosotros mismos y con los demás. Algunas de estas características incluyen extrema necesidad/pobreza, anhelo de auténtica espiritualidad, compromiso/estabilidad, verdadero significado del amor de Dios. Además, aleccionó sobre la necesidad de vivir el espíritu de pobreza mencionado por el Papa Francisco, que ha declarado el año 2018 como el año de los pobres, que es un verdadero reflejo del mundo en el que vivimos, lleno de gente pobre. Esta pobreza, dijo, es material, espiritual y de otros tipos.

También nos animó a buscar un lugar solitario donde descansar un rato. Esto ayuda a escucharnos a nosotros mismos (a hacer discernimiento), orar y hacer opciones importantes para el trabajo apostólico. Una vida sin reflexión no vale la pena vivirla como dijo un gran escritor una vez. Cuando nos retiramos a un lugar solitario para hacer una oración significativa, es probable que atraigamos a otros hacia nosotros y esto nos hará relevantes para el mundo actual que estamos viviendo lleno de desafíos.

Muchas personas viven como ovejas sin pastor, donde no hay ningún tipo de cuidado de la familia, de la sociedad y los roles de padres para los jóvenes están en falta, no existe orientación para los que la necesitan. Nuestro apostolado debe dirigirse a estas personas que son como ovejas sin pastor. Aquí es donde se encuentran la mayoría de la gente pobre y tenemos que hacer todo lo que podamos para mejorar sus vidas. Nos habló que priorizar a los pobres es fundamental, enseñarles los valores/virtudes del evangelio tan necesarios para esta sociedad.

Dijo además que debemos estar atentos a ser en lugar de preocuparnos con el hacer. “Ser” que se refiere a cuáles son nuestros valores fundamentales como personas religiosas, que implica la oración, caridad, además de nuestros votos o los compromisos que tomamos. La esencia del ser es, por tanto, esforzarse por vivir una vida de fidelidad, justicia e integridad de corazón, en vez de procurar una vida larga, riquezas y fundarse en la mentalidad capitalista del consumismo, el relativismo, el cientifismo y el individualismo. “Hacer”, por otro lado, se refiere a tratar de vivir de acuerdo con la opinión pública y hacer todo lo posible para impresionar a los demás, lo que al final nos hace vivir una doble vida llena de estrés. Dijo que lo malo muere pronto y los bueno dura mucho. Debemos tratar de vivir una vida equilibrada. Nos instó a orar en todo momento y citó que hay evidencia científica (trabajos de investigación) que indican que las personas que rezan permanecen en paz consigo mismas y con los demás y es probable que vivan más que otros (The Longevity Project, un libro de Dr Leslie Martin y el Dr. Howards S. Friedman informan de 20 años de investigación y seguimiento de 1500 adultos desde 1921). También San Agustín, después de tantos años de vida terrenal después de encontrarse con Dios, comenta: “nos has hecho Oh Señor, nuestros corazones están inquietos hasta que descansen en ti“. Estos investigadores descubrieron que las personas que rezan se involucran más en el trabajo social y el servicio gratuito a los demás que aquellos que no valoran la oración. Hizo hincapié en la necesidad de la Lectio Divina, que se centra en la oración personal centrada en las Escrituras, que debemos ser capaces de relacionar nuestra vida personal y nuestro trabajo. Dijo que la Lectio Divina es diferente de las oraciones de la comunidad como el Breviario, y que muchas veces confundimos.

Este fue un momento también para que podamos renovar nuestros votos y compromisos diarios basándonos en el carisma de Comboni, necesitamos renovar nuestros votos y compromisos y ver si todavía estamos en camino o no nos hemos desviado del primer amor. Necesitamos orar en todo momento y el padre Paulino Mondo, Asistente del Párroco de la Parroquia de Nuestra Señora de África, MCCJ La Parroquia de Mbuya, compartió hermosamente en una de las Misas de la mañana que la Oración del Padrenuestro tiene tres puntos en los que siempre debemos concentrarnos; nos enseña a pedir comida que utilizamos para alimentarnos y también debemos pedir esta comida para los pobres y necesitados y debemos esforzarnos por hacer esto en beneficio de los demás. En segundo lugar, dijo que nos enseña a liberarnos del pecado y del mal que es lo fundamental de este período de Cuaresma y esto lo podemos hacer a través del autoexamen diario de conciencia como lo enseña San Ignacio de Loyola en su hermoso libro de Ejercicios Espirituales y reflexiones personales durante nuestros momentos de soledad. El tercer elemento es prepararse para la muerte como decimos en la oración del Avemaría… la muerte es segura y tenemos que prepararnos para este momento. Cuando lleguemos al juicio final, ¿qué se dirá de nosotros, seremos las personas a la derecha del Señor o los de la izquierda que están malditos y arrojados al infierno eterno…? La respuesta debe ser profunda en nuestros corazones.

¿Qué debería hacerse a pesar de todo esto?

John Bosco MCCJ nos dio algunas sugerencias sobre cómo vivir con los asuntos anteriores que afectan nuestra vida de manera especial en este tiempo de Cuaresma;

Necesitamos adaptarnos a la novedad y renovar nuestra vida poniendo más énfasis en la oración y el ayuno, así como el apostolado que hacemos. Dijo que la vida religiosa no debería funcionar como las empresas que se administran con el objetivo de tener grandes resultados. Todos somos seres humanos que necesitamos de la misericordia de Dios para vivir una vida digna de su llamado. Dijo que los superiores necesitan buscar nuevas formas de animar sus comunidades y debemos leer los signos del tiempo en términos de tecnología y desarrollo humano. Debemos salir de las zonas de confort del así es como solía hacerse, los tiempos han cambiado. Cada uno debemos estar contentos con nuestra vocación, poner a Cristo/Iglesia en el centro de nuestras vidas y reducir el consumo de medios de comunicación, dinero, aparatos electrónicos, poder/política y satisfacción corporal de sexo y belleza. Debemos dejar de decir que “lo hago por obediencia” cuando alguien nos pone una tarea contraria a nuestra vocación.

También dijo que vivimos una vida centrada en Dios a través de los consejos evangélicos, la Lectio Divina y la reflexión diaria sobre el carisma del fundador. Nos animó a tener una proximidad constante a los valores del Evangelio, aceptar nuestras debilidades y trabajar en ellas para vivir fielmente.

También dijo que somos dadores de vida. Hay muchos hombres y mujeres religiosos hoy que tienen un conocimiento muy amplio sobre la humanidad y las instituciones que dirigen, pero que no tienen corazón para las personas y, sin embargo, nuestro Señor Jesús dijo “Padre, que sean uno…”. Juan 17:21 “. Tienen un conocimiento excelente de las instituciones que administran, pero nada de la vida en Cristo. Nos comentó que los votos nos ayudan a afirmar el sentido, obedecer las leyes de la naturaleza y Dios y enfrentar la vida con realismo. Finalizó este punto diciendo que “solo puedes tomar decisiones desde una posición reflexiva y discernida si aceptas el ciclo de vida: Nacimiento-crecimiento-muerte. Por lo tanto, llevemos a Cristo a las personas con las que trabajamos, las personas que lideramos y las personas que vivimos especialmente en las diferentes instituciones con las que dirigimos y trabajamos.

También fuimos bendecidos por la visita de los del Consejo General de los MCCJ de Roma que nos hicieron una visita apostólica y fue un momento maravilloso. Nos encargaron hacer nuestro trabajo en el espíritu de San Daniel Comboni a los pobres y necesitados. Nos dijeron que promoviéramos vocaciones ya que muchos sacerdotes y hermanas misioneras combonianas tienen una edad avanzada y es necesario traer a muchos a la mesa del Señor. Por lo tanto, todo lo que hacemos debemos promover el mensaje de San Daniel Comboni a los jóvenes para que lleven la vela de San Daniel Comboni ardiendo al resto del mundo.

Desde Uganda les deseamos feliz cuaresma, descubriendo dónde nos equivocamos para ser dignos seguidores de Jesús y renovar nuestras vidas imitando al Señor cuando estuvo en el desierto durante los 40 días que vivió entre los animales salvajes con los ángeles custodiándole. Nuestros animales salvajes incluyen el odio, los celos, el orgullo, la lujuria, la gula, la avaricia y muchos otros que llamamos ángeles para protegernos.

Eric Ezati LMC Uganda

Sequedad espiritual

espiritualidad

espiritualidadAgradezco sinceramente a nuestros colegas que consistentemente nos traen palabras de aliento para iluminarnos espiritualmente a través de sus propias experiencias misioneras de las cuales estamos aprendiendo mucho de lo que comparten con nosotros aquí en nuestro blog.

Humildemente me gustaría compartir mi propia experiencia en espiritualidad, en mi viaje tratando de encontrar dónde está nuestro Señor, aunque no lo he encontrado cara a cara, pero sé con fe que él está conmigo y todos nosotros haciendo el trabajo que hacemos. Sin Dios no habríamos llegado donde estamos por la intercesión de nuestro amado fundador, San Daniel Comboni, cuyos pasos tratamos de seguir, lo cual es como moverse entre un arbusto lleno de espinas.

Comparto con vosotros notas de algunos retiros y talleres a los que asistí y rezo humildemente para que quienes lo lean puedan encontrar algo que compartir con las personas con las que trabajamos y servimos en nuestra vida misionera.

Podrá ser beneficioso a nivel particular o ayudar o facilitar algunas conversaciones con los feligreses o los jóvenes con quienes trabajamos y con quienes estamos. Esta no es un texto perfecto, pero puede ayudar a pensar más para descubrir la voluntad de Dios en ti y en mí.

Se dice que la sequedad espiritual es un estado de angustia, desesperanza, insatisfacción o desanimo en nuestra vida y deberes espirituales.

Esto puede ocurrirle a cualquiera. Descubrimos que al participar activamente en la vida de oración, descubrimos que de alguna manera nos resistimos a ir a orar por la mañana o decirlo personalmente, al leer libros espirituales, las oraciones de la comunidad se convierten en una carga muy grande. Y no encontramos ninguna razón para lo que enfrentamos. Y no encontramos ninguna razón que pueda explicar nuestro estado. San Pablo lo llama espinas en su carne y no importa cuánto tiempo llevemos en este camino que es nuestra vocación misionera, estos momentos seguramente vendrán, como el día y noche, ya que dicen que no importa cuán larga o corta sea una noche, el día seguro que vendrá.

Veamos algunas causas, aunque no exclusivas, de sequedad espiritual

  1. El pecado que rechazamos admitir o descubrir, esto puede ser consciente o inconscientemente en nuestra vida. Si no tenemos suficiente tiempo para meditar en nuestra vida y servicios, será muy difícil descubrir los pecados que cometimos pero que no nos vienen a la mente en el momento de la confesión. Un gran pensador dijo que una vida sin reflexión diaria no vale la pena vivirla. Mateo 13:12 nos dice en tales momentos que siempre debemos aspirar a más de lo que necesitamos de Dios para que Dios nos bendiga incluso más con sus dones de gracia. Mientras más meditemos en nuestra vida y tratemos de descubrir nuestros errores, y entreguemos todo para hacer la voluntad de Dios, más nos mostrará las áreas de nuestras vidas en las que necesitamos ser liberados.
  2. Sobrealimentación y exceso de esfuerzo para algunas personas. Esto ocurre especialmente durante retiros de grupos o individuales, campamentos bíblicos donde aprendemos sobre la Biblia y aprendemos cómo vivirla en nuestras vidas, festividades eclesiásticas como la Navidad, Cuaresma, Pascua y Pentecostés en las cuales siempre nos preparamos para obtener lo mejor en todo lo que queremos. Después de esos momentos especiales, nuestros Padres Espirituales siempre nos alientan a prepararnos para esta sequedad espiritual que puede hacer que nos alejemos de nuestro enfoque principal en Jesús y nuestra amada Madre María.
  3. Cuando hemos sido bendecidos con la palabra de Dios por lo que leemos o puede ser cuando encontramos que nuestras peticiones de oración han sido respondidas. Estamos en un momento muy bueno de nuestra vida con la familia y el resto de la gente que nos rodea. En nuestras parroquias, donde hacemos nuestro trabajo misionero, tenemos una vida laboral excelente, sin desafíos y otros asociados o en el equipo de trabajo con los que trabajamos. Si no rezamos constantemente por la guía de Dios y le pedimos que nos deje prepararnos para lo peor en nuestra vida espiritual, podemos encontrarnos fácilmente cayendo en un estado de vacio y desesperación.
  4. Si tomamos una cantidad ilimitada de comida espiritual, por ejemplo, personas que pertenecen a más de 3 grupos de estudios bíblicos semanales, el grupo de oración puede sufrir. Personalmente, con nuestras asignaciones misioneras, donde somos dos o incluso uno, puede ser muy difícil tener un constante alimento espiritual y podemos ponernos a nosotros mismos en una época de mucho alimento espiritual una después nos puede llevar un tiempo muy largo para tener un alimento similar y así podemos ser objeto fácil de sequedad espiritual.
  5. La excesiva y desequilibrada alimentación espiritual puede dañar nuestra vida espiritual y nuestra sequedad espiritual, por lo que se nos aconseja que tomemos lo que corresponda, pero buscamos constantemente obtener más, ya que dicen que necesitamos estar sedientos de más y más en nuestra vida para descubrir al Señor.
  6. Ignorar nuestro cuerpo, así como la alegría, afecta el corazón y la carne. Debemos ser conscientes de nuestra salud. Estar trabajando como servicio o para un ingreso para la familia es necesario, pero necesitamos saber cuándo estamos cansados ​​y cuándo podemos hacer más. Llega a ser un desafío cuando tenemos que cumplir con plazos en lo que hacemos y nos puede llevar a un trabajo extenuante, privando así a nuestro cuerpo de descanso, un cuerpo cansado no puede concentrarse en la oración. Es por eso que Jesús en su misión, cuando hacía obras importantes, realizaba milagros, les decía a sus apóstoles que buscaran un lugar para descansar, entraba solo en un estado de oración y contemplación cuando se preparaba para una tarea difícil. Creo firmemente que si le damos descanso a nuestros cuerpos y damos un tiempo para disfrutar de la naturaleza que Dios nos ha dado para ayudarnos como flores, árboles, agua, animales y el resto para que vivamos mejor, nuestro viaje espiritual será más fácil. El Salmo 84: 2 nos descubre cómo tener sed de la Palabra de Dios y estar en su presencia y en su templo. Nunca podremos tener este anhelo cuando nuestro cuerpo y nuestra mente estén muy cansados.
  7. Una mente enferma puede ser la causa de un cuerpo enfermo. Somos personas diferentes que crecimos con diferentes orígenes familiares y, por lo tanto, cuando llegamos a vivir juntos en comunidad, los conflictos inevitablemente surgen. Si decidimos no prestar atención a los puntos de vista divergentes y pretendemos tolerarlos y vivir con ellos, esto afectará nuestra mente, que nunca encontrará fácil concentrarse en las oraciones. Uno de los escritores espirituales dijo que Jesús nos aconseja aprender a vivir con Judas en nuestra vida porque sabía que Judas Iscariote iba a traicionarlo, pero lo toleró y vivió con él durante tres años. Podemos decir que no somos Jesús, el divino, para tolerar a los Judas, pero San Daniel Comboni también tuvo algo semejante cuando se le presentaron algunas acusaciones; como que no rezaba, que no usaba el dinero para los fines que se suponía que era, y así sucesivamente. Parece que él personalmente no encontraba demasiada paz mental con los clérigos con los que estaba, y no es de extrañar por qué murió rodeado de algunos laicos, que estaban al lado de su cama en ese momento. Por ello creo que los conflictos son buenos, pero si no podemos resolverlos amistosamente como seguidores de Jesús, esto afectará la vida de oración y, por lo tanto, hará inevitable la sequedad espiritual en nuestra vida. Jesús saca esto muy bien en la enseñanza sobre el divorcio, Mateo 19: 1-9. Siempre habrá personas que nos contradigan en nuestro trabajo y en lo que enseñamos, pero recordar cómo él las manejó, es la solución para vivir con personas que siempre están creando controversia en nuestro trabajo misionero, en nuestras comunidades o donde trabajamos.
  8. Pérdida de equilibrio. Nuestra conversión para seguir a Jesucristo no nos exime de observar el orden de la creación del que somos parte. Tenemos amigos que necesitamos conocer, tenemos que atender nuestros deseos corporales naturales de intimidad con un espíritu de castidad en la vida religiosa o matrimonial y tenemos que reconocer que somos débiles y no siempre hacemos bien las cosas, y debemos rendirle estos sentimientos a Jesús para trabajarlos. Tenemos nuestras familias que necesitan nuestra compañía. Necesitamos tener momentos de recreación, como San Francisco de Sales puso en su libro Tratado sobre el amor de Dios y la Vida devota, que lo que nuestro cuerpo demanda, tenemos que hacerlo, incluso si eso significa ir a bailar, de fiesta, pero tiene que hacerse de manera que si Jesús viene a ti allí mismo, pueda juzgarte correctamente. El Rey Salomón nos dice que aprendamos a regular nuestro cuerpo de acuerdo con la razón.

La falta de equilibrio entre el trabajo y el descanso a largo plazo conduce a la sequedad espiritual como se explica en Génesis 2: 2-3, donde Dios descansó después de trabajar. Dios, en su naturaleza divina hizo esto, nosotros mortales que somos víctimas del pecado todas las veces de nuestra vida en este mundo de pecado. Muchos pecados que cometemos creo que suceden así, cuando estamos cansados ​​y exhaustos por todo lo que hacemos y estamos tan irritados que solo decimos cualquier cosa que se nos ocurre, sin reflexionar, sobre lo que vamos a decir o lo que acabamos de decir, tendemos a pasar nuestros juicios emocionalmente (irracionalmente) en lugar de racionalmente, algo de lo que podemos arrepentirnos más adelante.

Lecciones para aprender de la sequedad espiritual

Por tanto, la sequedad espiritual no debe tomarse como una calamidad. En Juan 11: 4 Jesús dijo que la muerte de Lázaro era para mostrar la gloria de Dios. Personalmente he pasado por momentos difíciles de desafíos en mi vida, pero más tarde le agradecería a Dios que hubiera sido así, me han acercado tanto a él. Por tanto:

  • A través de la sequedad espiritual, podemos crecer en nuestro camino espiritual, tendemos a descansar todo en Dios y decir con nuestra amada Madre María: Señor, deja que se haga tu voluntad y no la mía, si ha venido de ti, hazme lo suficientemente fuerte como para pasar por esto, pero no me lo quites. San Agustín dijo “el que te creó sin ti no te salvará sin ti”, por lo que debemos estar plenamente presentes para superar nuestra sequedad espiritual con la oración y el ayuno.
  • Las personas que están muy cerca de Dios experimentan lo mismo que nuestro Señor Jesús cuando lloró en el jardín de Getsemaní antes de entregarse para ser torturado y asesinado. Sus palabras, Padre, haz que pase de mí, pero hágase según tu voluntad… Cuando fue azotado, dijo hermosamente, mi corazón está listo o Dios, mi corazón está listo… Y estas son las palabras donde podemos aprender en nuestros momentos más desafiantes en nuestra vida, Moisés y Elia también experimentaron sequedad espiritual y cuando leemos acerca de ellos, encontramos que fueron humildes para dejar que la voluntad de Dios se hiciera presente en sus vidas a través de los momentos difíciles que estaban pasando, siempre podemos preguntarnos con qué frecuencia permitimos que la voluntad de Dios se cumpla en nuestras vidas, en lugar de defender nuestro orgullo para explicar por qué la otra persona está equivocada y yo soy el único correcto. Jesús no defendió su realeza celestial cuando Pilato le preguntó… ¿eres tú el rey? Dijo que fue él quien lo dijo… ¿por qué entonces nos es tan difícil aceptar que estamos equivocados y encontrar todas las razones posibles para defender nuestras acciones? La respuesta podría obtenerse simplemente del libro de Herbert Cardinal Vaughan, Humility of Heart, que es nuestro orgullo de que somos mejores que los otros nuestro egocentrismo en todas nuestras acciones. Santo Tomás dijo que la humildad adquirida es, en cierto sentido, el mayor bien. De Job 4: 2 aprendemos que Dios nos envía algunos momentos de sequedad para demostrar nuestro valor como sus fieles seguidores. Salmos 22:15 nos dice que el camino seguido por el mal siempre es amplio, sin desafíos y es sencillo en comparación con el camino que conduce a la felicidad eterna que está lleno de espinas y agujeros sobre los que caminar. Jesús dijo que quien quiera ser su discípulo debe tomar su cruz y seguirlo. Para mí, esta no es la cruz de madera o metálica que llevamos al cuello, sino los desafíos que enfrentamos en nuestra vida cotidiana mientras nos enfocamos en él pero nos mantenemos en contacto con la realidad en la que vivimos.
  • Después de cada montaña, hay un valle y este es el viaje a la eternidad y es como ver un tren o un camión completamente cargado subir una montaña con mucho humo y a una velocidad muy lenta y el conductor mantiene su velocidad porque sabe que llegar a un descanso donde todo estará bien y cuando llegue a otra montaña se prepara para eso. Este debería ser nuestro viaje, en nuestro trabajo, siempre para estar preparados para las montañas y las cruces de nuestra vida.
  • No se desesperen cuando llegue la sequedad espiritual, sus bendiciones están cerca, solo si persisten y no abandonan su enfoque en el Señor Jesús y viven en un espíritu de humildad sabiendo que todo es de Dios para hacer que lo conozcan mejor. Daniel y sus amigos prefirieron ser quemados en el corazón del fuego, no le pidieron a Dios que los salvase de las llamas, sino que dijeron que se hiciese la voluntad de Dios. Al final triunfaron en esto con Dios enviando a su Ángel para salvarlos.

¿Cómo superar la sequedad espiritual?

  • Trata de vivir una vida llena de perdón y tolerancia sin importar lo difícil que parezca ser y lo inocente que seas en todos los desafíos que estás atravesando. Nuestro Señor Jesús dijo… Padre, perdónalos, porque no saben lo que están haciendo… las mismas palabras que Santa María Goretti le dijo a su asesino, que Dios podría perdonarlo, pero que debería convertirse y aprender a hacer el bien… una verdadera intervención divina perdonar como seres humanos. Podemos decir que te perdono pero no lo olvidaré. Por tanto, el perdón requiere tiempo y esfuerzo mediante la oración. Etty Huillesum dijo “dentro de mí hay una primavera muy profunda y esta primavera es Dios. A veces la logro ver pero más a menudo está cubierta de piedras y arena, en ese momento Dios está enterrado, debe ser desenterrado nuevamente “y esto se hace solo cuando oramos y aprendemos a perdonar.
  • Confesión y seguridad renovada de perdón, esto viene con la necesidad de tener acompañante Espiritual que pueda guiarnos en todos estos desafíos que atravesamos y siempre nos toma de la mano en un viaje lleno de espinas y agujeros. Quienquiera que tengamos como nuestro acompañante espiritual es también un ser humano destinado a equivocarse, y cuando somos testigos de esto, no le inhabilita en su papel de ser nuestro acompañante espiritual a quien siempre podemos correr en caso de que estemos en un caos de sequedad espiritual.
  • Haga un examen diario de conciencia y descubra sus imperfecciones. Confiesa a Jesús los pecados que cometes cada día, elimina tu amor propio y conviértete en un niño pequeño como dice Jesús. Se humilde en tu relación con Dios y tu prójimo. Siempre pregúntate qué hiciste hoy, cómo lo hiciste, qué has omitido hacer. Siempre insiste en el acompañamiento espiritual. Los grandes escritores espirituales nos dieron dos cosas: dos cosas de las que nunca debemos quejarnos, ropa o comida, dos oraciones que deberíamos repetir con frecuencia, Dios mío, no me dejes ser curioso ni comunicativo y dos acciones para las cuales debemos estar siempre listos para tener Sagrada Comunión todo el tiempo y morir. Hagamos un esfuerzo para leer el excelente libro escrito por San Alfonso María de Liguori Preparación para la Muerte o cualquier otro autor y nos enseña cómo vivir una vida realmente comprometida para ir al cielo, ya que podemos morir en cualquier momento en cualquier lugar. Cuando llega la muerte, ¿estaremos preparados o no?, ¿cómo nos encontrará a ti y a mí?
  • Necesitamos vivir una vida de responsabilidad y disciplina en la vida privada y pública en todo momento y en todos los lugares a los que vayamos. Siempre debemos preguntarnos qué es lo que Jesús quiere que hagamos. Los escritores espirituales nos dicen que vivamos cada día como viene, tomando decisiones que deben hacerse todos los días, no de por vida, porque podemos controlar lo que hacemos en la actualidad, no en el futuro, lo que no estamos seguros de si debemos alcanzarlo o si ayer se fue lo dejamos a merced de Dios. Por tanto, todos los días necesitamos vivir mejor, ya que dicen que se logra la perfección en el presente, cuando estás haciendo todo lo que puedes.
  • Dependemos demasiado de sermones de segunda mano; aprender de los demás es muy bueno, pero no suficiente para nuestro crecimiento espiritual constante. Necesitamos extraer información de primera mano sobre la comida espiritual a través de estudios personales, leer libros espirituales, asistir a retiros personales y grupales, hacer de cada encuentro un momento de oración y aprender a apreciar a Jesús por todas las maravillas que hace en nosotros.
  • Todas las cruces y adversidades solo servirán para fortalecer el espíritu de los miembros que son fieles a esta santa tarea y decididos a poner la misión en el camino de la prosperidad segura, porque las obras de Dios siempre han estado al pie del Calvario y deben pasar, ​​como Jesucristo pasó, por el proceso de la pasión y la muerte para alcanzar la Resurrección. (Mensaje de San Daniel Comboni MDC 238) y Habiendo sido hechos partícipes de la pasión de Jesucristo, tenemos un mayor deseo que nunca de sacrificar nuestra vida por Cristo y por su misión (mensaje de San Daniel Comboni MDC 69). Con estas hermosas palabras de nuestro fundador, aprendamos a descubrir a Jesús en toda la sequedad espiritual que siempre obtendremos y preparémonos para cumplir nuestra parte en el sacrificio por el reino de Dios por el cual nos esforzamos en hacer nuestra parte.

Los asuntos de espiritualidad nunca se termina de tratar y nunca se entienden fácilmente, pero espero que con estas pocas pistas, nos pueda llevar a leer más y buscar más en diferentes fuentes sobre cómo podemos hacer todo esto en nuestra vida. Con nuestro trabajo, a veces no tenemos suficiente tiempo para orar, pero aprender a orar en el lugar donde trabajamos, comunicarnos con Dios en nuestro trabajo puede ayudarnos a orar.

Los desacuerdos están siempre presentes y cuando llegan, dejémonos que nos conduzcan a orar más, a través de la intercesión de nuestra Amada Madre María, San Daniel Comboni y nuestros santos patronos.

Con estas pocas palabras, mantengamos la vela encendida en nuestras palabras y hechos mientras le pedimos a Dios que esté con nosotros todo el tiempo de nuestras vidas. Y, pidiéndole al Señor que nos haga vivir una vida misionera laical comprometida con amor y dedicación al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María, luchar por algo que valga la pena y vivir como familia comboniana para alcanzar a todos, en palabras y acciones, mientras vivimos en paz y armonía. San Julián de Norwich dijo que el mayor honor que le podemos dar a Dios Todopoderoso es vivir con gusto gracias al conocimiento de su Amor. El Amor es el significado de nuestro Señor y tenemos que hacer todo por amor, Dios nos creó, Dios nos guarda y por lo tanto debemos recurrir a él todo el tiempo de nuestra vida.

A Dios sea la gloria.

Ezati Eric

Laico Misionero Comboniano. Uganda

 

Frutos

LMC AfricaNuestro encuentro ha traído al grupo las realidades de nuestra vocación misionera.

Hemos dialogado sobre temas como la comunicación, vocación, economía, formación y muchos otros. A través de estas discusiones hemos evaluado nuestro caminar y analizado dónde hemos cumplido nuestras metas, las áreas en que necesitamos mejorar y los desafíos que enfrentamos al hacerlo.

Al igual que San Daniel Comboni, todos hemos encontrado algunas dificultades para anunciar el Reino de Dios. En el carisma de nuestro fundador e intercesor, encontramos la fuerza para continuar en nuestra misión y hallar el camino para hacerlo. Como la palmera que lleva fruto de cocos, no es fácil compartir el dulce sabor de la salvación, pero encontramos la fuerza para escalar, a través de nuestra fe y nuestra comunidad.

LMC Africa

LMC África

Unidad

LMC AnchiloNuestro tema para el día fue la unidad.

El Señor nos ha traído a todos de diferentes tierras, con lenguas y culturas diferentes, reuniéndonos en el Espíritu Santo.

Nosotros mismos, nuestro trabajo y nuestras comunidades somos como un rompecabezas. Una pieza aislada tiene poco significado, pero juntos podemos crear algo hermoso
LMC Anchilo
LMC África